Cuatro años después del brutal asesinato de Lupe Jiménez, una vecina de Vilaboa de 36 años embarazada, a manos de su marido José Luis Cortiñas Romero, los seis hijos de la pareja -que en el momento del homicidio eran menores de edad- recibirán ayuda económicas como víctimas indirectas de un crimen machista.

El asesino y padre de los beneficiarios de la ayuda de la administración, fue condenado por la Audiencia de Pontevedra en marzo de 2016 a 20 años de prisión y debía indemnizar con 60.000 euros a sus hijos menores de edad y con 30.000 a la mayor, que cumplió los 18 mientras instruían la causa. Pero, según reconoce el Ministerio de Hacienda, aunque José Luis Cortiñas no se ha declarado insolvente, sólo ha abonado hasta la fecha 120 euros en concepto de responsabilidad civil.

Pese a la ausencia de la declaración de insolvencia, el Ministerio de Hacienda da la razón al despacho del penalista coruñés Víctor Bouzas y asociados, que respresenta a los hijos de Lupe, y considera que procede abonar la totalidad de la ayuda económica que corresponde a los seis hermanos "pues la suma de ésta y lo que han percibido en concepto de indemnización por daños y perjuicios, no supera la indemnización establecida en la sentencia".

Hace ahora un año que el Tribunal Supremo confirmó la condena de 20 años de cárcel por un delito de asesinato en concurso ideal con uno de aborto a José Cortiñas Romero, quien mató de 16 puñaladas a su mujer, Lupe Jiménez, cuando estaba embarazada de cinco semanas, en un lugar próximo a Santiago el 24 de febrero de 2014.

Los hechos probados recogen que tras sacarla de su casa materna en Vilaboa, con el propósito de acabar con su vida, le golpeó repetidamente en cabeza y cara, ocasionándole herida incisa-contusa en el puente de la nariz, fractura desplazada de huesos propios, hematoma periorbitario derecho y varias contusiones en la región frontal del cuero cabelludo y, sirviéndose de un instrumento cortante, le asestó tres puñaladas en el cuello, una en la muñeca y doce en la región anterior del tórax, produciéndose la muerte inmediata de la víctima.

Este crimen machista propició el destierro de Galicia de toda la familia del asesino, que también cumple su condena fuera de la comunidad autónoma.