Un tren-hotel que partió anoche de Pontevedra con destino Madrid descarrilló alrededor de las 00:15 en Pantón,entre Os Peares y Santo Estevo do Sil, cuando trasladaba a un total de 47 viajeros, informó un portavoz oficial de Renfe.

Un desprendimiento de tierra y piedras sobre la vía hizo descarrilar la locomotora, aunque el resto de vagones no se salieron. El maquinista tuvo que ser atendido por heridas leves, pero no fue necesario evacuarlo, mientras que los 47 pasajeros resultaron ilesos, de acuerdo con el 112.

Debido a la dificultad para acceder por carretera al punto del descarrilamiento, los viajeros permanecieron en el interior del tren hasta que a las 6:15 horas llegó otra locomotora e hizo retorceder los vagones hacia Ourense.

Una vez en Ourense, a los pasajeros se les dio la opción de retornar por carretera a sus respectivos puntos de origen o de seguir camino a Madrid. Esta segunda fue la elección de 25 viajeros, que a las 8:30 tomaron el Alvia para continuar hasta la capital del Estado.

El portavoz de Renfe destacó que al tratarse de un tren-hotel -que cuenta con camas y asientos reclinables- la comodidad de los pasajeros era mayor que en un servicio normal.

Una usuaria, sin embargo, se quejó en declaraciones a FARO de que el operador ferroviario no ofreció información al pasaje y también criticó la pasividad de la Guardia Civil, mientras pasaban "miedo" y necesitaban "respuestas".

Los viajeros del trayecto inverso, Madrid-Pontevedra, fueron trasladados por carretera a sus respectivos destinos al llegar a la estación de Monforte.

La vía Ourense-Monforte tuvo que ser cortada hasta que la locomotora fue retitada. Estos trabajos, en los que participan retroexcavadoras de Adif, se prolongaron durante todo el día, por lo que Renfe ha establecido un plan alternativo por carretera para cubrir este tramo. El tráfico se reanudó a las 18.00 horas.