"Un vladi" o "Vladimir" o "el juego del taxi". Estos fueron algunos de los "juegos" que según recoge la fiscal en su escrito el hostelero vigués practicaba con los menores. Este segundo semejaba una actividad inocente e infantil pero lo que supuestamente pretendía obtener con ellos era una "satisfacción". "El juego del taxi" consistía en decir la palabra taxi y tocar con la mano los genitales. El acusado cuando lo hacía "les agarraba del pene y los testículos a los menores", indica la fiscal.

El "vladi" también era otra de sus frecuentes expresiones. Según indica la fiscal, les despedía por la noche "invitándoles" a hacer una "Vladimir, una paja y a dormir", a lo que les pedía que lo grabasen con el móviles y se lo enviasen a él. Otro de los "juegos" que supuestamente planeaba "Papuchi" para los menores eran quedadas en su casa para "masturbarse en grupo" y a modo de "concurso" señalaba que el que "primero eyaculase" se ganaba una copa. "Para ello se valía de imágenes heterosexuales entre adultos en la televisión", recoge el escrito. Además, les prestó, siempre según señala la fiscal, su domicilio para mantener relaciones sexuales con sus novias, a lo que luego les recordaba que le debían una.

También fingía tener conocimientos de fisioterapia y les proponía darles masajes para recuperarles lesiones deportivas y aprovechaba para tocarles los genitales, indica la fiscal en su escrito de acusación.