Un hombre aceptó ayer 6 meses de cárcel por enviar dos mensajes de WhatsApp a su expareja pese a la existencia de una orden de protección a favor de la mujer que le prohibía comunicarse con ella, así como a aproximarse a menos de un kilómetro, para lo que estaba controlado con un dispositivo telemático. En los textos remitidos el hombre ya reconocía que "estaba cometiendo un delito" y, entre otras cuestiones, hablaba sobre el niño que tienen en común.