La Guardia Civil investiga, por un delito contra la seguridad vial, a una vecina de Silleda que sufrió un accidente de circulación en Tomiño, cuando conducía con una elevada tasa de alcohol que quintuplicaba el máximo permitido. Los hechos ocurrieron durante el pasado fin de semana tras un accidente de circulación entre dos turismos, con daños materiales, que se produjo en una céntrica calle de Tomiño en el que, al no haber un acuerdo previo entre las partes, solicitaron la mediación de la Guardia Civil.

Cuando llegaron al lugar los efectivos del Destacamento de Tráfico de O Porriño pudieron observar que una de las conductoras, en notorio estado de gestación, presentaba síntomas evidentes de ingesta de alcohol como: un fuerte olor, las pupilas dilatadas, apatía, incoherencias en las respuestas y cierto adormecimiento. Al realizarle la prueba de alcoholemia constataron que arrojaba unos elevados resultados de 1,42 y 1,46 mg/l., que quintuplicaba la tasa máxima permitida.

Ante estas circunstancias, además de las actuaciones propias de investigación y reconstrucción del accidente, se instruyen diligencias judiciales a la conductora, M. M.T.L., de 47 años, por un supuesto delito contra la seguridad vial. En caso de ser condenada, esta persona podría enfrentarse a la pena de prisión, de tres a seis meses, con una de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior de uno a cuatro años.

Sin mantenerse en pie

Por otro lado, la Guardia Civil investiga a un conductor por negarse a realizar la prueba de alcoholemia y quebrantar la inmovilización del vehículo. Apenas podía mantener la verticalidad cuando fue identificado en O Porriño.

Los agentes identificaron a M.M.A., de 37 años, por negarse a realizar la prueba de alcoholemia y quebrantar la orden de inmovilización del vehículo que conducía con evidentes signos externos de embriaguez. La incidencia se produjo, también durante el pasado fin de semana, cuando el destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de O Porriño recibe, a través del 112, la alerta de un usuario informando de una conducción negligente y temeraria en la autovía A-55, a la altura del polígono industrial de As Gándaras.

Al ser interceptado el vehículo por la patrulla del Destacamento de Tráfico, comprobaron que el conductor, que apenas mantenía la verticalidad cuando fue identificado, mostraba síntomas evidentes de ingesta de alcohol, pese a lo cual se negó a realizar las prevenidas pruebas de alcoholemia y detección de drogas, dando lugar a que se le inmovilizara el vehículo.

La negativa a realizar las pruebas establecidas y el hecho de que, además, también se pudo comprobar que horas después había quebrantado la orden de inmovilización del vehículo, dio lugar a que la Guardia Civil le instruyese las correspondientes diligencias judiciales como investigado por la comisión de delitos de desobediencia y contra la seguridad vial.