La Guardia Civil detuvo anoche en Arcade a F.C.M.S., militar retirado, tras el aviso al 112 que realizó su esposa, quien manifestó que su marido habría efectuado al menos un disparo con un arma de fuego -dos según algunos vecinos- en la cocina de su domicilio. La mujer, de mediana edad, que se encontraba en el interior de la vivienda, logró escapar ilesa junto a su hijo, de unos 20 años, y pedir auxilio ya en la calle.

Los hechos ocurrieron en el número 11 de la calle José Solla, lugar al que se desplazaron dos patrullas del instituto armado en torno a las 21.30 horas. Tras conocer lo sucedido de boca de la mujer, los agentes procedieron a acordonar la zona para evitar la posible huida del presunto autor de los disparos. También advirtieron a los vecinos del edificio, donde la pareja vive de alquiler, que no salieran de sus casas.

La Guardia Civil tras varios intentos infructuosos de comunicarse con el hombre a través del telefonillo logró hablar con el exmilitar, que finalmente se entregó y fue arrestado por los agentes, que lo trasladaron al cuartel en torno a las 22.00 horas.

El escenario de los hechos, una céntrica calle del casco urbano de Arcade, propició que muchos vecinos fuesen testigos de lo ocurrido tras la llegada de la Benemérita. "Nosotros no nos enteramos de nada hasta que vimos llegar a toda prisa ala Guardia Civil", indicaron varios clientes de un bar próximo que estaban en la terraza del establecimiento en ese momento. "Llegaron y al poco tiempo, no pasó ni media hora, se lo llevaron detenido", apuntaron, al tiempo que dedujeron que en el altercado nadie resultó herido, puesto que al lugar no tuvo que acudir ninguna ambulancia.

Mientras una de las patrullas conducía al detenido al cuartel, otros dos agentes regresaron a la vivienda con la mujer y su hijo, que abandonaron poco antes de la medianoche el domicilio con algunas pertenencias acompañados por esta segunda patrulla.