La cocina de una vivienda situada en la avenida de Ourense, en las denominadas "casas baratas" de Cangas, resultó destrozada ayer por la noche como consecuencia de una deflagración de gas, de la que el propietario de la casa salió ileso, aunque fue trasladado en ambulancia al centro de salud de la localidad para observación.

Una deflagración muy fuerte se dejaba oír a las 22.20 horas en toda la avenida de Ourense, frente al cuartel de la Guardia Civil de Cangas. Las aceras y la calzada se llenaron de cristales. El propietario de la vivienda, A.F.M., de 55 años, salió por su propio pie e ileso.

La cocina quedó destrozada y la casa completamente sin cristales, con varias puertas afectadas seriamente por la explosión. Según la Policía Local y Protección Civil de Cangas, los primeros en acudir a lugar de los hechos, la deflagración se pudo producir por una bolsa de gas que había detrás del horno, donde había varias bombonas de butano. Después de que los efectivos de emergencias entraran en la vivienda y comprobaran la zona, más complicado resultaba explicar que A.F.M. hubiese salido indemne.

Según la Policía Local, el hombre estaba, en el momento de la explosión, pegado a la ventana de la cocina. El propietario comentó a las efectivos que algo le golpeó en el pecho, pero no sabía si fue alguna parte de un mueble o la onda expansiva.