Un joven de 24 años abrió la cabeza con una garrota al padre de su novia, una menor de 16 años embarazada de cuatro meses, después de que el progenitor de la chica presuntamente la golpeara en la tripa para que abortara, además de insultarla. Pese a los golpes en el abdomen, el feto no resultó dañado y la gestación evoluciona con normalidad, según pudieron certificar los facultativos en el parte médico que el hospital Gregorio Marañón emitió tras atender a la menor.

Según el relato de la joven, coincidente con el de su novio y el de la madre de éste, el padre de la chica, que, al parecer, se oponía a la relación que mantenía su hija, acudió a la casa donde se encontraba la pareja viendo la televisión, en estado de embriaguez y golpeando la puerta. Al abrirle, entró y la agredió.