Un hombre de 40 años fue condenado en A Coruña por acosar a una empleada de un supermercado del Agra do Orzán, a la que causó "malestar, temor e intranquilidad". El procesado, que ya había sido condenado en 2012 por atosigar a la víctima, incumplió la orden de alejamiento y volvió a perseguirla entre octubre de 2012 y enero de 2013. El juez destaca en la sentencia que el condenado "no conocía de nada a la víctima, más que de verla trabajando en el supermercado".

El procesado reconoció en el juzgado que el 9 de octubre de 2012 se presentó en casa de la madre de la afectada, a quien le dijo que era amigo de su hija y que era "muy guapa". Al día siguiente se presentó en el súper para ver a la denunciante, quien se escondió en la oficina ante el temor que le infundió. El procesado insistió en entregarle a sus compañeras de trabajo una nota. Otro día no la vio en el negocio y recorrió otros locales de la cadena para localizarla.