Un ourensano de 43 años de edad que trabajaba como funcionario de prisiones en el centro penitenciario de A Lama (Pontevedra) apareció muerto ayer por la mañana, sobre las 10 horas, después de que su automóvil fuera localizado, abierto, la madrugada del sábado al domingo, bajo el viaducto que enlaza las nacionales N-120 y la N-525, en Velle (Ourense). El hombre había desaparecido el domingo tras decir a sus familiares que acudía a comprar pan. Los allegados presentaron denuncia ante la Policía Nacional a las 20.30 horas del domingo. El cadáver fue localizado en una zona apartada de la carretera que une Ourense con la localidad de Barra de Miño, en Coles. La primera hipótesis descarta la participación de terceros.