Una mayor sensibilización, campañas y adecuación de espacios de trabajo tanto en pequeñas como grandes empresas, propició que la comunidad gallega redujese sustancialmente en los últimos años el número de procedimientos judiciales por accidentes y lesiones en el desempeño de una actividad laboral. Según expone la Memoria de la Fiscalía Superior de Galicia de 2015, las infracciones penales en el ámbito de la siniestralidad laboral se redujeron a la mitad, pasando de 2.580 expedientes en 2014 a los 1.226 el año pasado, lo que supone una media diaria de hasta tres infracciones. Esta cifra confirma la tendencia descendente de la siniestralidad a nivel autonómico, que desde 2010 se redujo en un 75%. Un lustro atrás, las cifras de infracciones penales se situaban en 4.885 frente al poco más de un millar que se registró en 2015.
Los datos que muestra el órgano judicial denotan un gran descenso tanto en el número de procedimientos incoados, tanto si se trata de delitos como de faltas. En el caso de los delitos, la variación ha sido muy patente en Pontevedra, donde de los 744 delitos de lesiones por accidente laboral, en 2015 este dato se sitúa en 472. A pesar de tratarse de un descenso notable, la provincia del Lérez sigue siendo la más afectada por esta siniestralidad laboral, ya que un 40% de las infracciones que se producen en la comunidad corresponden a Pontevedra, seguida de Ourense, A Coruña y Lugo.
Condenas
Haz clic para ampliar el gráfico
El último de estos caso tuvo lugar precisamente en la provincia pontevedresa, concretamente en Vincios, Gondomar, donde el pasado 29 de septiembre el propietario de un picadero de caballos fue condenado a año y medio de prisión y otros seis meses de rehabilitación por el grave accidente laboral que sufrió en enero de 2015 uno de los dos mozos de cuadra que trabajaban en sus instalaciones. El empleado se precipitó desde una altura de dos metros y medio al romperse un tejado de uralita y sufrió graves lesiones que le dejaron en estado vegetativo hasta que falleció en abril de este año, 16 meses después del siniestro.
A tenor de este fallecimiento, uno de los datos más negativos expuestos en la Memoria es el número de delitos por homicidio en accidentes laborales, siendo el único dato que sufre un incremento en 2015, al registrarse un total de 14 en la comunidad gallega, diez de ellos entre Pontevedra y Ourense, cuatro en A Coruña y tan solo uno en la provincia lucense. En el caso de las faltas, éstas pasaron de 1.109 a 86 en 2015. Este descenso tan pronunciado se debe a que lo que muchas infracciones tipificadas como faltas ahora son delitos leve, y éstos todavía no están registrados por Fiscalía.
Riesgos laborales
Es en este tipo de delitos donde tanto la Fiscalía General como la autonómica ponen especial "énfasis" debido a que centra la mayor parte de la actuación preventiva en materia de seguridad laboral. Desde el ISSGA (Instituto Galego de Seguridade e Saúde Laboral) realizan proyectos sobre la presencia del riesgo, evaluación de éste y medidas preventivas que se puedan aplicar a las empresas que los datos de infracciones, delitos y faltas en materia de seguridad laboral continúen descendiendo.
