Juan Carlos Quer acudió ayer al Juzgado de Instrucción 2 de Ribeira. Es el que lleva el proceso sobre la custodia de su hija pequeña Valeria, cuya custodia le fue concedida. Acompañaba a la menor, de 16 años, que compareció en el tribunal y fue sometida a un examen forense. Llegaron a las diez de la mañana y abandonaron el tribunal pasadas las dos y media de la tarde. Allí, a las puertas de los juzgados, Juan Carlos comparecía ante la multitud de periodistas que aguardaban. Mientras,la adolescente se resguardó en un coche con un tío paterno.

Sobre la desaparición, volvió a apelar a los ciudadanos para que ayuden "si pueden aportar algo de luz". Tras subrayar que confía en el trabajo de la Guardia Civil, añadió que por parte de la familia queda "confiar en Dios". "Y que Diana se lo merece... que ha sido una niña que... vamos a dejarlo ahí", dijo. Lo que sí no pudo ocultar, dado el tiempo transcurrido desde que el 22 de agosto desapareció su hija, es cierto pesimismo pese a que no ha querido dejar de agarrarse "a la última llama que podemos tener de esperanza". "No soy ningún ingenuo. Sé que las expectativas de encontrar a mi hija con vida no son las mejores", manifestó.

Filtraciones

El empresario aseguró que, por respeto a sus hijas, no volverá a realizar declaraciones. En las de ayer criticó que se filtrase la "supuesta denuncia" de mayo de Diana y su madre, de la que dijo no tener conocimiento. Y quiso aclarar: "Hasta que contraje matrimonio jamás tuve una denuncia ni ningún problema con la justicia". Y añadió: "En los 24 años de matrimonio y 2 de noviazgo jamás tuve denuncia alguna de mi exmujer". Juan Carlos Quer señaló que sólo a raíz de la demanda de divorcio instada por ella le cayeron "9 o 10 denuncias" que se han archivado. "Soy un buen padre, soy un señor. Lo único que he hecho ha sido velar por el interés y la integridad de mis hijas y desafortunadamente, salvo un milagro, no creo que llegue a poder proteger a mi hija Diana", afirmó.

El padre de la desaparecida señaló que ya depositó en el juzgado de Ribeira que lleva la custodia "tres archivadores" que acumula desde diciembre de 2013 "con documentación probatoria de la realidad de todo lo que está aconteciendo". Juan Carlos Quer, además de poner énfasis en las denuncias penales que recibió, señaló que ya puso en conocimiento de los tribunales la "manipulación atroz" de sus dos hijas.

De Valeria, a su cargo, contó que sigue con rigor las indicaciones del facultativo que la atendió en Urgencias y que le entregaron en el juzgado. Indicaciones sobre fármacos, horarios, alimentos y, añadió, "con las personas con las que sí y que no pueden relacionarse". "Con eso creo que queda la cosa clara".

Y mientras, el Juzgado de Instrucción 1 de Ribeira, el de la desaparición, dejó sin efecto las citaciones de testigos previstas, entre ellas la de la madre como adelantó el martes su abogado.