La Audiencia de Pontevedra ha decidido desestimar la petición de libertad de Sinaí Giménez y sus hermanos Juan Paulo, Marino y Saúl, en prisión provisional por dictar su propia ley y extorsionar a los vendedores ambulantes en los mercandillos de la provincia de Pontevedra. La sala acoge los fundamentos expresados por el Juzgado en los autos por los que envió a prisión a los cuatro "morones".

Por tanto, el tribunal provincial ha decidido no excarcelar a los hijos del autodenominado rey de los gitanos gallegos, Olegario Giménez -en arresto domiciliario por la misma causa- y mantener la prisión provisional como así consideró el juez de Cangas.

Olegario Giménez y sus cuatro hijos fueron detenidos el pasado mes de abril en al Operación Vida acusados de organización criminal, extorsión, coacciones o amenazas y delito contra la Seguridad Social y blanqueo de capitales, entre otros delitos. Bajo la apariencia legal de una cooperativa de vendedores ambulantes, las fuerzas de seguridad sospechan que Sinaí Giménez, el más conocido del clan, había montado un grupo criminal en familia. El juez de Cangas les imputa también presuntos delitos de fraude a la seguridad Social, tráfico de drogas y tenencia ilícita de armas.