El fiscal jefe de Pontevedra elevó ayer a definitivas sus conclusiones provisionales en el juicio del conocido como fraude del gasóleo, pero lo hizo solo en cuanto a los cuatro acusados que no reconocieron los hechos en la primera sesión del juicio. Otra docena de procesados llegaron a un acuerdo con el Ministerio Público que permitió una ostensible rebaja de las penas. Además se retiró la acusación contra cinco acusados, mientras que otro ya falleció y uno está en rebeldía.

Por lo tanto, mantuvo la petición de pena por altas penas de prisión para estos cuatro acusados aunque sí pidió al tribunal que tenga en cuenta el importante retraso que acumuló la instrucción de una causa que comenzó a investigarse en el año 2000 y que llega ahora a juicio. Lo hizo pidiendo que se aplique la circunstancia atenuante "muy cualificada" de dilaciones indebidas, lo que, en caso de condena, supondría una rebaja significativa de las penas. El juicio quedará visto para sentencia el martes.