Un informe solicitado por el juez revela que el presunto descuartizador de Majadahonda Bruno H.V. padece un trastorno psicótico diagnosticado de "esquizofrenia paranoide", por el que fue internado varias veces y que le lleva a creer que pertenece a una hermandad secreta. "El trastorno psicótico que hemos diagnosticado impregna toda su vida y distorsiona completamente el enfoque adecuado de la realidad en la que vive", señala el documento. Su importancia va más allá de fijar el estado psicológico del presunto asesino de Adriana Giogiosa y Liria Hernández, sino que podría determinar atenuantes o eximentes en caso de condena. Bruno H.V. tiene raíces familiares en la provincia de Lugo.