Ramón Martínez Cendón, el joven de 27 años de edad que supuestamente mató a cuchilladas a su madre el pasado noviembre en Vigo, se ha quitado la vida en la prisión de A Lama. El presunto parricida apareció muerto este lunes por la mañana en su celda del módulo de enfermería del penal pontevedrés y se encontraba bajo el protocolo antisuicidios. El juzgado de guardia de Pontevedra se hizo cargo de las diligencias relativas al levantamiento del cadáver del reo. Su fallecimiento se produce cuando la investigación judicial sobre el crimen que se le atribuía, que lleva el Juzgado de Instrucción número 3 de Vigo, estaba prácticamente finalizada. Con su muerte, y una vez se de traslado a este tribunal del certificado médico de la defunción, la causa se archivará.
El pasado 8 de noviembre Ramón Martínez mató supuestamente a su madre, María Inmaculada Cendón, de 56 años, en el salón de su piso de la calle Zamora de Vigo tras atacarla con un cuchillo jamonero. Le asestó, según desvelaría después la autopsia, un total de 12 puñaladas. Tras su arresto la misma noche de los hechos -confesó el crimen de su madre a una vecina, que fue quien dio la alerta-, y dado el estado que presentaba, el joven fue trasladado a la Unidad de Psiquiatría del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, donde permaneció unos días hasta que fue derivado a la Unidad de Acceso Restringido del Hospital Provincial de Pontevedra. De ahí, en torno a principios de diciembre, fue trasladado ya al centro penitenciario de A Lama en virtud del auto de ingreso en prisión, comunicada y sin fianza que se había dictado en el marco de este procedimiento. Al joven se le diagnosticó una esquizofrenia, si bien todavía no se había definido de qué tipo era.
El joven apareció muerto este lunes en su celda del módulo de enfermaría. Estaba sujeto al protocolo antisuicidios. Este periódico se puso ayer en contacto con el gabinete de prensa de Instituciones Penitenciarias, si bien hasta el momento esta institución ha guardado silencio.
Investigación judicial
La instrucción judicial que se seguía en Vigo ya estaba prácticamente finalizada, ya que sólo se estaba a la espera de la entrega de los informes forenses sobre el estado mental del presunto parricida, que se encontraban muy avanzados. Ahora el caso se archivará por extinción de responsabilidad penal por el fallecimiento del supuesto autor del crimen.
El joven será incinerado hoy por la tarde en el tanatorio Vigomemorial. De forma previa, a las 18.00 horas, habrá una misa rezada en la capilla de estas instalaciones.
