El golpe a la violenta banda juvenil desarticulada en Vigo, con 12 detenidos y casi medio centenar de integrantes identificados -de diferentes nacionalidades y gran parte de origen sudamericano- se adelantó para frustrar la multitudinaria pelea que habían convocado a través de las redes sociales para esta noche en el exterior de la discoteca de A Ramallosa, donde suelen protagonizar altercados, peleas y robos, según informó ayer la Guardia Civil. El grupo clamaba "venganza" porque varios de sus integrantes, incluido uno de los supuestos jefes, habían sido agredidos el pasado fin de semana. Un día después de los arrestos, todos están en libertad.

Los dos presuntos cabecillas, el brasileño Helyson L.S.M de 20 años, y Nerson Javier R.C., nacido en Bolivia aunque con nacionalidad española y de 18 años, pasaron ayer a disposición judicial. Tras su interrogatorio, en el que negaron pertenecer a banda u organización criminal alguna, la juez de Instrucción 5 que coordina la operación los dejó en libertad con cargos a propuesta del fiscal, pero les impuso como medida cautelar una orden de alejamiento de la zona del conflicto a la que no podarán acercarse en un radio de 500 metros. Los otros diez arrestados, incluidos tres menores y una chica, ya habían quedado en libertad con cargos la víspera tras declarar en el cuartel de la Guardia Civil de Vigo. A todos se les imputa pertenencia a grupo criminal.

Los investigadores consideran que la "peligrosa" banda criminal de jóvenes que ha sido "destapada y descabezada" en Vigo era "muy violenta" y trataba de emular en su comportamiento delictivo a las bandas que operan en Sudamérica. Esta es la primera banda de tales características detenida en la provincia de Pontevedra, según resaltó el Subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Antonio Coello, que compareció con el coronel jefe de la Comandancia de Pontevedra, Miguel Estévez Lara, para informar sobre esta operación. "Salían desmadrados por el alcohol y las drogas. Este sábado habían quedado por Facebook para partirse la cara, son de encefalograma plano", expuso el responsable del Instituto Armado. Por eso se aceleraron las detenciones, aunque quedan flecos. Los agentes ya contaban con quedaran en libertad "pero no podemos permitir que cada fin de semana campen a sus anchas. Han quedado en libertad, pero es lo que había que hacer. Ahora se lo pensarán dos veces antes de volver a actuar así", dice Estévez.

El grupo está relacionado, según los investigadores, con un centenar de incidentes en Val Miñor el último año, especialmente en el entorno de la discoteca Ramallosa 2000 y Tui. En la operación, bautizada como 'Chukis' que es el nombre que empleaba la banda, la Guardia Civil ha tramitado 11 atestados por lesiones y riña tumultuaria, robo con violencia, hurto, atentado, desobediencia grave y resistencia. Además, se han presentado 70 denuncias administrativas por alteraciones del orden público, peleas, altercados y consumo de estupefacientes en la vía pública.