Ahmed Chelb, el presunto autor del crimen de Eva Blanco, asesinada en Algete (Madrid) en 1997, se ahorcó ayer en la cárcel madrileña de Alcalá Meco, donde estaba ingresado desde el 9 de octubre del pasado año. El recluso apareció por la mañana ahorcado en su celda con los cordones de sus zapatillas. La juez ha solicitado al centro penitenciario información "detallada" de las circunstancias del fallecimiento del supuesto asesino.

Chelb, que entró en prisión 18 años después del asesinato gracias a una investigación de la Guardia Civil en la que el ADN jugó un papel clave, estuvo en protocolo de suicidios hasta el pasado 16 de diciembre, cuando se levantó la medida tras los informes médicos.

Manuel Blanco, padre de la joven asesinada, afirmaba ayer: "Estoy con rabia de que no hayan podido juzgarlo y que después, no haya pagado lo que debería haber pagado". Insistió en que el presunto asesino "no ha cumplido lo que tenía que cumplir" y que "le tendrían que haber juzgado". "Por lo menos está donde tenía que estar", añadió. Chelb se encontraba en prisión provisional acusado de delitos de detención ilegal, agresión sexual y asesinato.

El cadáver de Eva Blanco, de 16 años, fue hallado junto a la cuneta de la carretera que une Algete y Cobeña en 1997. La autopsia determinó que la joven había sido apuñalada en veinte ocasiones y que podría haber sido violada. La investigación fue muy complicada.