Una réplica del terremoto del pasado lunes, que alcanzó una magnitud de 4.7 y tuvo su epicentro en el mar de Alborán, se sintió durante unos segundos en Melilla a las 07.32 horas de ayer. Los ciudadanos se despertaron sobresaltados por los nuevos temblores de tierra que, aunque no causaron daños materiales ni personales, están aumentando la tensión y el cansancio de los vecinos de la Ciudad Autónoma. Desde la madrugada del lunes hubo más de 350 réplicas de distinta intensidad.