Los técnicos de la Armada Francesa intentan poner en marcha las máquinas del "Modern Express", el buque escorado ayer a 148 millas de Ortegal y cuya tripulación fue rescatada. El país galo envió al remolcador L´Abeille Bourbon, con sede en Brest, para intentar controlar al buque, que está a la deriva en el golfo de Vizcaia. Además, enviaron un Falcón 50 para realizar tareas de reconocimiento desde el aire y vigilar todo el dispositivo.

Su intención es intentar arrancar las máquinas mientras la empresa armadora decide si es necesario remolcar el buque o no. Francia se hizo cargo a última hora de la tarde de ayer de la coordinación del rescate del mercante, tras abandonar el área jurisdiccional británica.

El suceso ocurrió sobre la una de la tarde de ayer, cuando el capitán del "Modern Express" emitió una señal de socorro y solicitó la evacuación de sus 22 tripulantes al escorarse el mercante 40 grados debido al corrimiento de su carga, vehículos y madera.