Una fuerte pelea entre una pareja en su domicilio de Vigo, que acabó con el hombre y la mujer heridos, llega a juicio ocho años después. El varón, JL.A.F. , compartirá el banquillo de los acusados en la Audiencia Provincial de Pontevedra con la que entonces era su compañera sentimental, T.N.O.Q. El fiscal solicita penas que suman 7 años y 8 meses de prisión para él por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia de género y maltrato físico habitual, mientras que ella afronta un total de 5 años por un delito de lesiones con instrumento peligroso y una falta continuada de vejaciones. Ambos están acusados también de incumplir la orden de alejamiento que se dictó el día de la agresión, en el caso de la mujer para insultarle con mensajes y en el del varón por agredirla en otras dos ocasiones en las que se la encontró.

Los hechos se remontan al 8 de junio de 2007. El fiscal sostiene que sobre las 6 de la mañana surgió una discusión entre ambos acusados. JL.A.F. "guiado por el ánimo de menoscabar la integridad física de su pareja", agredió a la mujer, la tiró al suelo de un empujón e inmovilizándola con las rodillas en la espalda le agarró fuertemente pro el cuello con las dos manos. En ese momento, ella logró hacerse con una navaja y también "guiada por el ánimo de menoscabar la integridad física de su pareja sentimental" le asestó siete puñaladas que le alcanzaron al varón en el cuello, en el tórax, en el hombro y en el brazo izquierdo. El hombre intentó arrebatarle la navaja entablándose un forcejeo en el que siguieron golpeándose mutuamente.

El procesado fue atendido poco después por los servicios de emergencias en el propio domicilio. Como consecuencia de la agresión JL. A. F. tuvo que ser intervenido quirúrgicamente y fue ingresado en la UCI. Tardó en curar diez días y como secuelas presenta siete cicatrices en los lugares donde fue apuñalado.

La mujer, a consecuencia de la agresión, sufrió contusiones en la rodilla y tres heridas incisas en los dedos y palma de la mano derecha. Tardó 8 días en curar y presenta como secuelas tres cicatrices.

Además de los años de prisión, la Fiscalía solicita para ambos órdenes de alejamiento y prohibición de comunicares o aproximarse mutuamente a menos de 500 metros, tanto de sus domicilios como de lugares de trabajo o locales que frecuenten durante 5 años para la procesada y 5 años y medio para el acusado. La vista oral, al tratarse de un caso de violencia sobre la mujer, se celebrará en la Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra el próximo martes.