Marcos Vigo asumió ayer la que será su primera condena por narcotráfico pese las numerosas investigaciones de que ha sido objeto. Aceptó contestar a todas las preguntas, incluidos los abogados de la defensa, hasta que tras pedir permiso al presidente del tribunal espetó al abogado defensor de Viñas Morgade. "No voy a contestarle más, ni a ninguno de los letrados. ¿No ve que perjudico a su cliente? Parece que su abogado le quiere inculpar más que yo", momento en el que recibió aplausos en la sala.

Y es que mientras Carballa Magdalena y Viñas en su interrogatorio se limitaron a decir, pese a las escuchas telefónicas, que el 22 de mayo fueron con Marcos a Vigo por un tema de un coche, y le acompañaron a la Ramallosa sin saber que abordaba con Camesella un tema de drogas porque les invitó a comer en Cangas, el letrado ahondaba en tales relaciones pero también en las que tenían con otras personas, caso del narco Vázquez Roma, que inicialmente fueron imputadas pero cuyo caso se archivó antes de llegar a juicio.

Aunque había anunciado que no respondería a otros letrados, hizo una excepción con el de Carballa Magdalena. "Me acompañó a las reuniones, pero él era reacio, nunca se quiso meter. Estuvo conmigo pero no aportó nda", manifestó Marcos Vigo.