Una noche de fiesta que concluyó con 14 horas de terror. La Sección Quinta de la Audiencia con sede en Vigo acogió ayer la primera jornada del juicio contra un ciudadano cubano que se enfrenta a 17 años de prisión acusado de violar reiteradamente y detener ilegalmente durante 14 horas a una mujer en su domicilio de la Travesía de Vigo. La vista, que seguirá hoy, se celebra a puerta cerrada para preservar la intimidad e identidad de la víctima a petición expresa de la letrada que ejercita la acusación particular en nombre de la mujer.

El acusado y la víctima fueron los primeros en prestar declaración, pero sus versiones son totalmente contradictorias salvo por el hecho de que se conocieron aquella misma noche y acudieron a varios locales de copas. Sobre las 8 de la mañana ambos se fueron a casa del procesado, y a partir de ese momentos sus relatos difieren radicalmente.

Leonardo R.P. admitió ante el tribunal que mantuvieron relaciones sexuales, pero aseguró que habían sido "consentidas", mientras que la mujer relató el horror que vivió durante las 14 horas en las que, asegura, el hombre la mantuvo retenida y las reiteradas violaciones que sufrió hasta que le convenció para que la dejara marchar del piso, prometiéndole que no iba a denunciarle.

En la primera jornada del juicio también declararon varios clientes y responsables de un bar al que la joven acudió a pedir auxilio en cuanto salió del piso del acusado, así como los primeros policías que acudieron al lugar e inspeccionaron la vivienda. En los pasillos de la Audiencia también se dieron cita algunos testigos de la defensa, si bien apenas trascendieron datos de sus declaraciones para preservar a la víctima.

Hoy será el turno de los peritos y de los médicos forenses. En principio ni víctima ni acusado presentaron en su día lesiones relevantes, pero, según los informes médicos que obran en autos, la mujer presentaba un cuadro de estrés postraumático grave y precisó tratamiento.

Los hechos se remontan al 31 de agosto de 2013. La mujer y el hombre se conocieron aquella noche y tras recorrer varios locales, a primeras horas de la mañana, -sobre las 8.00 horas-, subieron al domicilio de Leonardo R.P.

El fiscal sostiene que una vez los dos solos, el procesado "en tono agresivo" la conminó a quedarse con él a la vez que cerraba la puerta del dormitorio para evitar que huyera del piso. En un momento de descuido del presunto agresor, la víctima llegó a recoger su ropa y trató de escapar. Pero Leonardo, según ele escrito provisional de acusación, "se lo impidió y con tono violento le recriminó su comportamiento y la tiró sobre la cama, donde con el propósito de satisfacer sus deseos sexuales, la agredió sexualmente".

Esta no habría sido la única violación que sufrió la joven a lo largo del día, hasta que pasadas las 21.00 horas convenció al hombre para que la dejara marchar. El acusado, siempre según la acusación pública, liberó a la mujer 14 horas después de haberla retenido en su domicilio cuando ella le aseguró que no iba a denunciarle.

La Fiscalía solicita 17 años de prisión para Leonardo R.P.: 11 años por la agresión sexual y 6 años por el delito de detención ilegal. También pide, en caso de condena, que no pueda acercarse no comunicarse con la víctima en 15 años y que indemnice a la joven en 30.000 euros.