Rosario Porto reitera su inocencia desde prisión, asegura que el "monstruo cruel y desalmado" que asesinó a su hija Asunta "sigue libre" y pide que se le aplique la ley del talión, "el ojo por ojo". Desde la cárcel de Teixeiro, donde permanece ingresada desde que hace un año fue detenida por el asesinato de su hija adoptiva junto a su exmarido Alfonso Basterra, ha remitido varias cartas a programas de televisión para declinar las entrevistas que le habían solicitado. Aprovecha estas misivas para proclamar su inocencia y luchar contra las "mentiras y calumnias" a las que en su opinión se ha visto sometida.

"Mientras me quede el más mínimo aliento seguiré luchando por lo que considero fundamental, verdad y justicia", expone en la carta remitida a Espejo Público. Consciente de que tal vez "no es la mejor idea", ha decidido explicar de su puño y letra como se encuentra en estos momentos.

"Llevo un año largo resistiendo mentiras, calumnias y filtraciones interesadas, descontextualizadas y por lo tanto malinterpretadas, que no concuerdan con la verdad de mi hija" , expone Porto, que incide en que "el monstruo cruel, el malnacido y desalmado que lo hizo, continua sin pagar por su crimen". Un asesino al que la madre de Asunta pide se le aplique "el ojo por ojo". Rosario Porto asegura que la pérdida de su hija es "irreparable" y que "el dolor desgarrador" que padece la acompañará el resto de su vida.

No explica sus contradicciones en las declaraciones judiciales, ni las sedaciones de la pequeña, ni del supuesto pacto o los indicios que llevaron a la Fiscalía a imputarla junto con Alfonso Basterra por el asesinato de la pequeña Asunta, de 12 años y cuyo cuerpo apareció en la cuneta de la pista forestal de Teo, muy cerca de la casa de verano familiar.

Porto critica una investigación policial llena de errores y una instrucción judicial falta de rigor. También denuncia que los medios de comunicación han vulnerado su presunción de inocencia. Esta situación , asegura, la hace sentirse abatida. "El deterioro físico y mental que padezco, agravado en los últimos tiempos , han convertido mi vida en una lucha por la superviviencia", asevera. Tras afirmar que la pérdida de la pequeña es del todo "irreparable", insiste en que luchará por la verdad y la justicia.

La madre de Asunta está siendo tratada de su depresión en el centro penitenciario coruñés de Teixeiro. Los días en que se encuentra pero solicita una baja, lo que le exime de bajar al patio y realizar las tareas cotidianas que tiene asignadas, como limpieza de las zonas comunes.

Los padres de Asunta Basterra se enfrentan a 18 años de prisión cada uno, petición formulada ya por la Fiscalía, aunque el juicio sigue sin fecha. El sorteo para seleccionar a los miembros del jurado popular está pendiente de que la magistrada que presidirá el tribunal resuelva los últimos recursos planteados por las defensas. El abogado de Porto, el penalista coruñés José Luis Gutiérrez Aranguren, ha solicitado la nulidad de la instrucción al considerar que se vulneró el derecho a un juez imparcial, y también la anulación de la declaración de los testigos que lo hicieron sin presencia de los abogados defensores.

Otra de las nulidades solicitadas por Aranguren es la grabación de las conversaciones de Rosario y Alfonso en los calabazos tras ser detenidos. Esta propuesta prosperará con seguridad ya que el Constitucional acaba de considerar ilegal este tipo de grabaciones en otro caso similar. El mismo que llevó al juez instructor a autorizarlas: la detención de dos hombres a los que se grabó para conocer al tercer implicado. La condena se les ha mantenido porque había otros indicios y pruebas, además de las escuchas.