Dos años de prisión y multa de 45.263 euros. Esta es la condena impuesta por la magistrada del Juzgado de lo Penal 2 de Vigo a un vecino cuyo desahucio destapó una plantación de marihuana. Los hechos se remontan a mayor de 2013.

Los agentes judiciales se dirigieron a la vivienda, en la calle Emilia Pardo Bazán, para el lanzamiento del desahucio pues el inquilino había dejado de abonar las rentas. En el interior de la casa no había nadie, pero al entrar se encontraron con 88 plantas de cannabis en floración en varias habitaciones que contaban con iluminación, riego automático y climatización para su crecimiento.

En el salón estaba montado el secadero de estupefacientes y se intervinieron sustancias químicas y básculas de precisión. El fuerte olor del cultivo de marihuana era perceptible desde el exterior, por lo que tras el hallazgo avisaron a la Policía Nacional que se hizo cargo de la investigación.

Eduardo R.Q., cuyo progenitor había formalizado el contrato de arrendamiento inicial de la vivienda, aunque hacía tiempo que no residía allí, negó en el juicio cualquier relación con la plantación de marihuana y aseveró que desde el año 2011 no residía allí, asegurando que tanto su hermano como su expareja tenían acceso a la casa.

La versión exculpatoria ha sido rechazada por la magistrada. En abril de 2013, según el propietario de la vivienda, le hizo un pago cuando antes del desahucio le pidió que pagase la renta y que el permitiera acceder a la casa, sin que el acusado se lo permitiera. Además, en el interior de la vivienda se encontraron enseres personales suyos, fotos, ropa y una carpeta con documentación.

La juez sostiene, en la sentencia, que tampoco puede prosperar la tesis de otras personas tenían también acceso a la vivienda "cuando el propio acusado dice que su expareja abandonó el domicilio en el año 2011 y que su hermano vive en Barcelona; difícilmente puede ser compatible la distancia con el cuidado de la plantación".

El fallo judicial establece, según los informes periciales, que la cantidad de marihuana intervenida en la vivienda asciende a 7.582 gramos, con un valor en el mercado de 40.263 euros, ya que se fija a 5,31 euros el gramo. También se incautaron otros 126,6 gramos de marihuana seca y lista para el consumo valorada en 572, 25 gramos. De ahí que la multa proporcional se fije en 45.263 euros.

El fallo sostiene que dada la cantidad de estupefacientes intervenidos, y el los instrumentos de pesaje, dosis ya preparadas y los medios de luz, riego control, climatización y abono, supone una cantidad más que apreciable para el consumo propio.