El colegio de letrados convoca una concentración contra la "brutal agresión" a su compañero

M. FONTÁN | VIGO

La agresión a Roberto José Álvarez Carrero ha provocado la inmediata reacción del Colegio de Abogados de Pontevedra, al que pertenece este jurista. Además de ponerse a disposición de este colegiado "para el ejercicio de todas las acciones judiciales que sean necesarias para obtener el resarcimiento del daño sufrido", la entidad ha convocado una concentración de "repulsa" por estos hechos y en defensa de la "dignidad" del ejercicio de la abogacía. La manifestación será el próximo martes día 6 ante los juzgados de Tui, el mismo lugar en el que el jurista sufrió lo que la entidad califica de "brutal agresión".

"Invitamos a los ciudadanos que se unan a la concentración, así como al resto de operadores jurídicos: funcionarios, fiscales, jueces...", afirma Alberto Lastres, secretario del Colegio de Abogados de Pontevedra. El decano de la entidad, Ramón Jáudenes, ya se puso en contacto con el letrado herido para interesarse por su estado y poner el colegio a su disposición para actuar como estime adecuado. "Cuando mejore mantendremos una reunión con él y se decidirán las medidas, siempre bajo las directrices que él nos indique", concretaba ayer Lastres.

El comunicado emitido por el colegio transmite el "incondicional apoyo" a Álvarez Carrero. "Si cualquier acto de violencia repugna a una sociedad civilizada en la que son la ley y el derecho los cauces por los que se resuelven las controversias, resultan aún más reprochable cuando la víctima de dicho acto es un profesional del Derecho que simplemente está ejerciendo su función de defensa, amparado por la Constitución y el resto del ordenamiento jurídico", se señala. El herido era abogado de oficio del guardia civil detenido por supuesta amenazas. "Cualquier agresión es reprochable, pero aquí el letrado ni siquiera actuaba para un cliente particular, había sido llamado porque le correspondía, lo que merece un especial rechazo", dice el secretario de la entidad colegial.

Agresiones como éstas a abogados, añade Alberto Lastres, son del todo "excepcionales": "Afortunadamente no tenemos ningún precedente, al menos cercano en el tiempo, pero el hecho de que sea excepcional no puede hacernos tener una actitud más relajada; el colegio debe intervenir para evitar que esto vuelva a suceder".

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