Rosario Porto, la madre de Asunta Basterra, la niña de 12 años que fue hallada muerta el pasado domingo, permanece en el Cuartel de la Guardia Civil de Lonzas, en A Coruña, donde llegó en torno a las 14.00 horas de este martes tras haber sido detenida en Santiago por un presunto delito de homicidio, a raíz de las "incoherencias" percibidas en su testimonio en relación a la desaparición de su hija adoptiva.

Esta conocida abogada de Santiago de Compostela fue detenida por la Guardia Civil en el entorno del mediodía de este martes, después de que se celebrase en el compostelano tanatorio de Boisaca la incineración del cuerpo de Asunta y fue conducida al cuartel de A Coruña, donde inicialmente podría permanecer durante 48 horas.

Al tratarse de una detención de carácter policial, es decir, no ordenada por el juez, Rosario Porto podría estar en dependencias de la Benemérita hasta 48 horas, pero en caso de que considere que exista una "causa justificada", podría ampliarse este plazo a 72 horas, según han informado a Europa Press fuentes judiciales.

Como por el momento se trata de una "detención policial" aún no se sabe cuándo podría pasar a disposición judicial. En principio, está previsto que pase, al menos, esta jornada en dependencias de la Guardia Civil, a la espera de que preste declaración si es que accede a ello.

En su primera declaración, Rosario Porto, abogada y excónsul de Francia en Galicia, contó que a principios de verano sorprendió a un hombre dentro de su casa, ubicada en una céntrica calle de Santiago, que había intentado asfixiar a la menor pero, al percatarse de su presencia, el presunto agresor huyó.

Pese al incidente, la madre no presentó denuncia por estos hechos, han detallado a Efe fuentes de la investigación, que han considerado extraño tanto este relato como otros datos aportados por Rosario Porto.

La investigación en las últimas horas ya se centraban en el entorno más próximo de la menor, pues algunos indicios apuntaban que los responsables de lo ocurrido podrían encontrarse entre su círculo familiar. Además, se ha procedido a revisar pormenorizadamente las cintas de las cámaras de seguridad del centro compostelano, por donde se habría movido la menor antes de su desaparición, una niña de origen chino adoptada cuando tenía menos de un año de edad por la pareja que formaban la abogada Rosario Porto y el periodista Alfonso Basterra.

Esta mañana, la portavoz de la familia, Tareixa Navaza, en una conversación con Radio Galega desmentía primero la noticia para después matizar que no le constaba la detención porque la madre, dijo, acaba de salir del tanatorio. Lo que incrementó la confusión por el arresto.

Autopsia

La autopsia apunta que Asunta Basterra falleció sobre las 9 de la noche del sábado, apenas una hora después de que según su familia saliera de casa con sus llaves, y hora y media antes de que sus padres denunciaran su desaparición.

Los investigadores trabajan con la hipótesis de que se produjo una muerte violenta, si bien el cuerpo de la niña no presentaba golpes ni marcas de estrangulamiento, por lo que no se descarta una muerte por asfixia. De todas formas serán los análisis biológicos y toxicológicos de muestras remitidas a Madrid las que esclarecerán lo ocurrido.

Una vez realizada la autopsia en el Instituto Anatómico Forense de Santiago de Compostela, el titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Santiago de Compostela, José Antonio Vázquez Taín, acordó ayer entregar a la familia el cadáver de la niña, así como de sus objetos personales. Hoy mismo será incinerada.

Abatimiento en el instituto de la menor

El instituto en el que estudiaba la niña de 12 años hallada muerta el fin de semana, el IES Rosalía de Castro, ha suspendido todas las actividades programadas para esta tarde, tanto las lectivas como las deportivas o de otro tipo, con el fin de facilitar que alumnos, profesores y trabajadores puedan acudir al funeral de la menor, que se celebrará a las 20.30 horas en una iglesia de la zona nueva de Santiago.

Pesar e incredulidad eran las sensaciones que expresaban los rostros de unos 900 compañeros de Asunta durante la concentración silenciosa que realizaron ayer en el patio del instituto donde estudiaba la menor.