El joven ourensano del clan merchero de Los Barata, condenado hace unos días a 29 años de prisión por el asesinato de Ángel Sánchez Anaya, un taxista de 60 años en Salamanca al que tiroteó en 2010 en Salamanca, sigue en libertad. Aunque la Audiencia le retiró el pasaporte y le ha prohibido salir al extranjero, la familia de la víctima y la Fiscalía han solicitado su inmediato ingreso en prisión aunque la sentencia no sea firme por el riesgo de fuga y la facilidad que tiene de poder ocultarse entre clanes mercheros en España y Portugal. No sería la primera vez. José Manuel García Barata cometió el crimen mientras era buscado para cumplir condena por el asalto a un chalé de O Cumial, en Ourense, donde maniató y golpeó a la propietaria. El Juzgado de Menores le Ourense le había impuesto 6 años en centro de internamiento pero salió impune porque cuando al fin lo arrestaron tras matar al taxista la condena había prescrito.

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