Tragedia en Málaga. Un hombre condenado por violencia machista contra su expareja y cuyo cadáver fue hallado ayer junto al de su hija de 6 años en una vivienda de Campillos mató supuestamente a la menor y después se suicidó. La pena de prisión que le habían impuesto en diciembre al hombre, Diego G.P., que se encontraba en trámites de separación, estaba suspendida, mientras que no constaban medidas de alejamiento hacia su hija, según informó la Delegación del Gobierno de Andalucía en un comunicado.

Un cuñado del fallecido fue quién halló los cuerpos en la casa: el padre estaba ahorcado en las escaleras y la menor sobre una cama, con espuma en la boca. Este familiar iba a recoger a la niña, que había pasado las vacaciones de Semana Santa con el padre, para llevarla a la estación y que regresara en tren a Mataró (Barcelona), donde reside con su madre.

El presunto agresor había sido condenado por el Juzgado Mixto número 3 de Antequera (Málaga) por violencia machista contra su expareja a seis meses de prisión con prohibición de acercamiento y comunicación hacia ella durante dos años. Es la primera vez este año en España que un padre ejerce la violencia machista atentando contra la vida de la hija menor en común con su expareja aprovechando el régimen de visitas.

El cadáver de la niña no mostraba signos de violencia aparentes, según el informe preliminar de los investigadores, por lo que habrá que esperar a la autopsia para determinar las causas de la muerte. Se baraja la ingesta de alguna sustancia o que la menor falleciese por asfixia o ahogamiento.

El suceso ocurrió en una vivienda unifamiliar de dos plantas de la calle Claveles de la barriada Las Flores, cerca del centro de este municipio de unos 8.600 habitantes. El padre era un trabajador eventual que había tenido empleo como jornalero. Según el alcalde de Campillos, el fallecido y su expareja "aparentemente no han tenido ningún problema en el pueblo", sus familiares son personas "sencillas" y "buena gente" y a él lo veía "muy apocado" e "incapaz de que puedan ocurrir estas cosas".

La Policía Local requirió asistencia psicológica para familiares de los fallecidos. El Ayuntamiento de Campillos decretó dos días de luto oficial y las banderas del consistorio ondearán a media asta.