Dos personas murieron y otras trece resultaron heridas al estrellarse un helicóptero contra la grúa de uno de los edificios más altos Londres y caer sobre la calle. El siniestro ocurrió cerca del edificio de los servicios secretos británicos (MI6). Todo apunta a que la falta de visibilidad pudo contribuir a que el aparato, de dos motores y uso comercial, en el que tan solo viajaba el piloto, se estrellara.