Un vecino de Marín ha sido condenado a dos años de prisión por intentar violar a la que entonces era su esposa, unos hechos que la Audiencia de Pontevedra como como agresión sexual en grado de tentativa y en los que valora las circunstancias atenuantes de embriaguez y dilaciones indebidas, ya que los sucesos juzgados se remontan al año 2007. El hombre tiene además prohibido acercarse a menos de 200 metros o ponerse en contacto con la que ahora es su exmujer durante tres años.
La sentencia establece que el marinense condenado llegó a su casa en la madrugada del 13 de enero de 2007 "habiendo ingerido bebidas alcohólicas" y se dirigió a su mujer que estaba viendo la televisión en el salón de su casa diciéndole que quería dormir con ella, a lo que se negó. Reaccionó con violencia y la siguió hasta la cocina, en donde la arrancó la ropa, manoseándola siempre en contra de su voluntad. En un momento dado la agarró y la llevó al dormitorio, en donde intentaba forzarla cuando entró su hija en la casa, a quien la mujer pidió ayuda. Solo entonces el hombre desistió.
Aunque la víctima intentó no declarar en el juicio -lo que no pudo hacer porque al haberse divorciado no puede acogerse al derecho a no inculpar a un pariente-, la sala dio credibilidad al relato de hechos de la denuncia y que reiteró sin contradicciones ante el tribunal.
