Tres años de prisión. Ésta es la pena impuesta por el Juzgado de lo Penal número 3 de Vigo a dos atracadores por un asalto cometido en una entidad bancaria de la parroquia redondelana de Chapela en agosto del pasado año: los ladrones iban armados e hirieron a una de las personas que estaba en la sucursal, en la que en esos momentos no había clientes pese a que ya se encontraba abierta al público. Junto a los dos autores materiales del robo también fue condenado un tercer integrante del grupo, que en su caso actuó como cómplice, ya que facilitó su vehículo a los asaltantes, motivo por el cual le fueron impuestos siete meses y quince días de prisión. Este último también tendrá que pagar una multa de 900 euros porque tras los hechos presentó una denuncia falsa simulando que le habían robado el coche.
El juicio contra los tres acusados del asalto a la entidad de Caixanova tenía previsto celebrarse ayer en el juzgado vigués, pero ya no fue necesario al alcanzar la fiscal y las defensas un acuerdo de conformidad y asumir por tanto los imputados la autoría de los hechos. La representante del ministerio público demandaba inicialmente una condena de cuatro años y medio de prisión para los autores materiales del robo, pero finalmente rebajó su solicitud a tres años de cárcel al apreciarle la circunstancia atenuante de toxicomanía, que también le fue aplicada al cómplice del atraco.
Los delitos por los que fueron condenados los dos atracadores, que permanecían en prisión provisional en el centro penitenciario de A Lama, desde donde fueron trasladados para la vista oral, fueron el de robo con violencia e intimidación con uso de arma y el de lesiones. Mientras, el colaborador fue penado como cómplice en este robo, ya que facilitó su vehículo a sabiendas de que iba a ser utilizado en el atraco, y por simulación de delito por la presentación de la denuncia falsa posterior.
Los hechos se remontan a hace ya más de un año, concretamente al 7 de agosto de 2009. Ese día, en torno a las ocho y media de la mañana, los dos atracadores accedieron a esta entidad bancaria de Chapela cuando la misma ya se encontraba abierta al público. Ambos irrumpieron en la oficina armados con un objeto similar a una pistola y también con un cuchillo, con el objetivo de intimidar a los trabajadores. Una vez dentro gritaron a los empleados que les entregasen el dinero, logrando un botín de 1.800 euros. En el transcurso del asalto una persona resultó herida.
Intento
La sentencia condenatoria por este atraco se produce la misma semana en la que dos personas encapuchadas intentaran asaltar otra entidad bancaria de Chapela, en este caso de La Caixa.
