Un atraco a punta de cuchillo en una peluquería –que resultó fallido–, y una fuga en autobús urbano –que duró apenas dos paradas–, acabó ayer con el vigués A.M.M.H., de 39 años, en prisión provisional acusado de un delito de robo con intimidación.
Las dos empleadas del establecimiento de estética ubicado en un centro comercial en la Plaza de América acaban su jornada laboral a última hora de la tarde del jueves cuando al grito de "o me lo dais por las buenas o por las malas", un hombre armado con un cuchillo de grandes dimensiones las intimidó exigiéndoles el dinero que hubiese en el local.
El ladrón intentó abrir la caja registradora, pero no pudo, por lo que la tiró al suelo y la pateó sin conseguir que se abriera, entonces salió corriendo del local y se dirigió a una parada de autobús próxima.
Numerosas personas fueron testigos de la fuga y facilitaron a las dotaciones de la Policía Nacional que acudieron al lugar del atraco tanto la descripción del individuo como la información del autocar en el que viajaba.
Una patrulla policial localizó a A.M.M.H. en un autobús que circulaba por la Avenida de Castelao, apenas un par de paradas después del lugar donde se subió al transporte público.
Los agentes que le identificaron encontraron oculto en su pantalón un cuchillo de grandes dimensiones, 15 centímetros de hoja, con el que habría intimidado a las empleadas.
El hombre, que cuenta con otros tres antecedentes policiales anteriores, el último por el mismo motivo, pasó ayer a disposición judicial.
Inicialmente estaba previsto un juicio rápido, por lo que además del detenido fueron citadas en el juzgado de guardia las dos empleadas asaltadas, si bien finalmente el caso se verá como procedimiento abreviado a la espera de que se valoren tanto los daños causados en el centro de estética, como los informes forenses solicitados ya que al parecer el hombre tiene problemas de toxicomanía.
La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Vigo, que se encontraba de guardia, le tomó declaración y ordenó el ingreso en prisión provisional del detenido en la cárcel pontevedresa de A Lama.
El hombre, al parecer, reconoció que había esgrimido el cuchillo en el atraco, si bien habría manifestado que no recordaba bien lo ocurrido pues además de diversa medicación habría consumido una 6 copas de aguardiente antes del asalto.
