El experimentado piragüista tomiñés David Castro Álvarez, de 33 años, falleció el lunes por la tarde en un accidente cuando se entrenaba en Portugal en el río Vez, a su paso por el municipio luso de Arcos de Valdevez. Dos compañeros del fundador del Club Teixugos tomiñés, Aarón Serantes (vecino de Ponteareas) y Emilio Ferreiro (natural de Verín pero residente en Tomiño), habían rebasado la zona con sus kayaks sin problemas y, al ver que el de su amigo se golpeaba con un árbol, trataron de ayudarle lanzándole una cuerda pero no logró sostenerse a flote. Impotentes y sin poder hacer nada para salvarlo ante la fuerte corriente del río que ponía también en peligro sus vidas, vieron como David se quedaba atrapado entre las ramas, según relataron después al comandante de los Bombeiros de Arcos de Valdevez que participaron en el complicado rescate del cadáver.

El kayak de David Castro, conocido como "O Panadeiro" por el negocio familiar que regentaba en Tomiño, embistió unas ramas del margen y fue directo a un tronco caído en el medio del río, una colisión que resultó fatal, ya que la corriente era muy fuerte y el joven piragüista quedó atrapado bajo el agua en unas ramas del fondo, al parecer con el cubrebañeras de su traje de neopreno.

El accidente ocurrió cuando casi habían terminado la bajada del Vez, a unos 200 metros de donde tenían su furgoneta. Uno de sus compañeros desembarcó y atravesó un terreno inhóspito hasta que una hora después, según los Bombeiros, llegó a una vivienda desde donde pidió auxilio al 112. Eran las 17.30 horas cuando los Bombeiros de Arcos de Valdevez y de Viana recibían la alerta y desplegaban los equipos de rescate.

Un grupo de buceadores, otro de escaladores y varios nadadores se desplegaron en la zona, pero lo accidentado del terreno dificultó el rescate. Efectivos de emergencias con equipos de rápel tardaron una hora en bajar hasta el lugar del accidente en el río por un precipicio con una inclinación del cien por cien. Los buceadores se encargaron de asegurar el cuerpo de la víctima en una operación que se prolongó durante varias horas ante la peligrosidad del lugar y la fuerte corriente.

Los Bombeiros prestaron en el lugar del accidente un teléfono móvil a los dos compañeros de David Castro para que se pusieran en contacto con el responsable del club Teixugos, a la vez que les prestaron apoyo psicológico "ya que uno de ellos se encontraba muy desorientado", según el comandante del puesto de Arcos de Valdevez. "Vieron como su amigo se golpeaba, trataron de agarrarlo con una cuerda y comprobaron que perdía el control de la canoa y se dirigía a un precipicio donde el agua hacía fuertes remolinos. No logró salir al quedar preso en el fondo en las ramas de un árbol, y eso ha sido muy duro para ellos. La operación de rescate comenzó a las 17.30 horas y terminó a las cuatro y media de la madrugada con la entrega del cuerpo al Hospital de Medicina Legal de Viana. Los efectivos respondieron de forma rápida ante las dificultades a salvar ", explica el comandante. La autopsia del joven tomiñés se realizó ayer y hoy será trasladado al tanatorio de Guillarei. Su entierro tendrá lugar mañana a las 17.00 horas en la parroquia de Tomiño.