Jesús es patrón de pesca y en la actualidad se encuentra embarcado en aguas de Chile. Ayer habló ayer con su mujer en Cangas y ésta le confirmó que ya se había hecho pública la detención e ingreso en prisión de Pilar Pérez, en cuya agencia de seguros contrataron hace dos años un fondo de inversión, cuyo importe, aunque no lo confirman, podría ascender a cerca de 800.000 euros, y por el que recibían un 10% de intereses al mes.

Ellos fueron los primeros en darse cuenta de que estaban siendo estafados y que sus ahorros peligraban. Pero al igual que una gran mayoría de la veintena de afectados que se asociaron en Cangas en una plataforma tras descubrirse la presunta estafa de la agencia de seguros, quieren mantenerse en el anonimato. Otros afectados ni tan siquiera se asociaron conscientes de que manejaban dinero negro con la persona detenida que resultaría imposible recuperar.

Pilar Pérez, de 50 años, fue detenida por la Guardia Civil el pasado día 20 en la denominada Operación Embrujo –nombre de una de sus tiendas de ropa ya cerrada en Cangas– en la que también fueron apresados su marido A.L.M., de 53 años; y la hija de ambos, R.L.P., de 28, por su presunta colaboración en la presunta estafa, si bien estos quedaron en libertad. El Juzgado número 3 de Cangas sólo decretó el ingreso preventivo en prisión de la conocida agente de seguros por una presunta estafa en la gestión de seguros y de fondos de inversión. La investigación de esta estafa que la Guardia Civil cifra, en principio en 2 millones de euros, sigue abierta. De hecho ayer se realizaron nuevos registros en las oficinas de estas corredurías en Cangas y en Marín, que desde hace meses están cerradas.

Respecto a la detención de Pilar Pérez, la mujer del patrón de pesca asegura que "se lo tiene merecido porque jugó con la vida de las familias y se pasó tres pueblos". Asegura que ya conocían desde hacía años a la agente de seguros porque la familia de su marido tenía contratadas las pólizas de los coches "y siempre respondió bien".

Por esta razón no sospecharon nada cuando dice que ella les convenció para meter un dinero en unos fondos de inversión. Esto ocurrió en el año 2007 y la mujer del patrón asegura que durante el primer año "recibimos bien los intereses. Todo iba normal. Yo acudía a la oficina y me daba el importe. Además había firmado una documentación que garantizaba que había un asegurador detrás".

Sin embargo la situación cambió a finales de año: "Acudí a la oficina y me dijo que no le habían dado el dinero de ese mes". Así siguió hasta que en enero esta familia optó por darle un plazo de seis meses, hasta junio, para que le devolviera al menos un tercio del capital "y el resto cuando pudiera". Todo fueron excusas, según confirma esta mujer, y se dio cuenta de que aquello "era una estafa como una catedral. ".

Entre muchos de los afectados impera también la ley del silencio. Aseguran que hubo llamadas anónimas en las que se les advertía que tuvieran cuidado con lo que decían. La mayoría no quieren que se les identifique porque temen represalias. "Nos aseguraron que tuviésemos cuidado y vimos cosas que no nos gustaron", afirma una de las afectadas. Pero están más preocupados por la estafa de los fondos de inversión, donde aseguran que había mucho dinero metido, que en la de los seguros, donde el dinero no asciende mucho más allá de los 500 euros.

Mientras el marido de Pilar Pérez volvía ayer su a trabajo sin querer hacer declaraciones, el Partido Popular de Bueu, a través de su líder, José Barreiro, dejó claro ayer que la mujer nunca tuvo cargos en el partido ya que sólo era simpatizante.