El Tribunal Supremo acaba de confirmar la sentencia de la Audiencia Provincial de Pontevedra del 27 de octubre del pasado año en la que se condenaba a 7 años de prisión a María Dolores Álvarez Álvarez por el intento de asesinato de su hijo que entonces contaba con cinco años de edad.

El Alto Tribunal desestima el recurso interpuesto por la defensa de la mujer y ratifica como hechos probados los que se recogen en el fallo de la Audiencia pontevedresa. Un suceso que se produjo entre el 21 y el 22 de marzo del pasado año en el domicilio de esta mujer en Fernández Ladreda y que conmocionó a la ciudad de Pontevedra.

Según la sentencia, la procesada intentó quitarse la vida y llevarse también por delante la de su pequeño. Cerró con llave la puerta del piso, la atrancó colocando por dentro un sofá y obligó a su hijo a tomar ansiolíticos y antidepresivos que después también ingirió ella misma. El fallo añade que la mujer, de 28 años de edad, tumbó en el suelo la bombona del gas con la espita abierta y accionó los mandos de la cocina para expulsar el gas.

Asimismo, la sentencia revelaba que las pruebas de tóxicos realizadas a la orina del niño dieron positivo por cocaína y benzodiacepinas.

La sentencia explica que María Dolores Álvarez se puso en contacto por teléfono con su ex pareja, con quien había tenido una discusión días antes, y en varias llamadas le anunció su intención de quitarse la vida y la del pequeño: "Mañana tienes que traer dos cajas, porque yo y el niño nos morimos".