Sólo conocidos de tomar chiquitas en el bar y jugar al dominó. Esta es la única relación que admitieron ayer Sabino Luis A.C., "Metralletas", antiguo miembro de la Legión francesa y ex mercenario; y Francisco P.A., antiguo emigrante en Holanda y ex peluquero en Bouzas. Los dos sexagenarios fueron juzgados ayer por tráfico de drogas, especialmente éxtasis y heroína en las zonas de ocio en Vigo, y tenencia de armamento de guerra.

El fiscal solicita penas que suman 20 años de prisión. En el caso del ex legionario pide 5 años por un delito de tráfico de drogas que causan grave daño para la salud, y 8 por depósito de armas de guerra (una ametralladora, varias pistolas y revólveres), depósito de munición (casi 300 cartuchos y balas de distintos calibres) y tenencia de explosivos, (al menos 8 detonadores). Además, propone una multa de 6.000 euros.

En el caso de Francisco P.A., el ministerio público reclama una condena de 7 años de cárcel por tráfico de drogas y multa de 78.000 euros. Las defensas, por su parte, piden su absolución y en el caso del ex mercenario la anulación de las escuchas telefónicas y por consiguiente de los registros de las naves y el domicilio del procesado, donde se intervinieron las armas, tres pastillas de hachís y una bolsita con pastillas de éxtasis con la misma marca que las 900 intervenidas en casa del peluquero.

Francisco O.A., que carece de antecedentes, fue detenido en la estación de autobuses en julio de 2008 cuando regresaba de Holanda con 300 gramos de heroína. En su casa guardaba 900 pastilla de éxtasis. "No sabía que aquí estaba sancionado, en Holanda no", explicó. Admitió que la heroína se la dio una persona que debía recogerla en Vigo y que iban a pagarle 500 euros por el transporte. En cuanto a las pastillas reconoció que las compraba en Holanda a 30 céntimos y las vendía en Vigo a un euro. Ya había vendido 500 a un portugués.