José Ángel C.G., vecino del municipio pontevedrés de O Grove, ha aceptado hoy una pena de ocho años y medio de prisión, tras reconocer que había abusado sexualmente, durante varios años, de una menor de nueve años.

En el juicio, celebrado esta mañana en la Sección Segunda de la Audiencia de Pontevedra, el acusado reconoció los hechos y aseguró ante el juez que "lo lamentaba muchísimo" y que estaba "arrepentido" de lo que había hecho. La fiscal del caso, Encarnación Boullón, explicó ante los medios de comunicación que el acusado "se había conformado con la pena, tras reconocer su culpabilidad" e indicó que los hechos por los que había sido culpado el vecino de O Grove, se habían repetido durante "largo tiempo".

De hecho, los abusos sexuales se produjeron desde el año 2003, cuando la menor tenía 9 años, hasta julio de 2007, cuando finalmente la víctima le contó a su madre lo que estaba ocurriendo.

Los abusos tuvieron lugar en la vivienda de la propia menor, ya que el acusado era amigo de un tío de la niña, por lo que aprovechaba sus visitas a la familia para ejecutar los actos delictivos.

José Ángel C.G., que era trabajador municipal y al que el Ayuntamiento de O Grove le abrió un expediente sancionador, tendrá que indemnizar a la víctima con 50.000 euros, según la petición fiscal, a la que se sumó la acusación particular.