“Acaba con él , acaba con él”. Con esta frase Roi Caride urgió a su amigo Manuel Dos Anjos que rematara al joven vigilante Xosé Álvarez una vez que ya había recibido un primer disparo, según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía. El vigilante seguía moviéndose y murmurando en voz baja, por lo que Roi le dijo a Manuel“acaba con él,acaba con él”, según el escrito de acusación.

El Ministerio Público expone que Manuel, viendo que el vigilante seguía dentro de su coche y que la puerta estaba cerrada, “con el ánimo de apropiarse de lo que la víctima pudiera tener en el interior y utilizando un objeto contundente, rompe el cristal de la ventanilla, le pone el cañón del arma en la garganta y efectúa un segundo disparo a bocajarro, dejando Xosé Álvarez Nión de moverse”.

Este segundo disparo provocó una herida cervical y fracturó una vértebra al joven, que falleció. A continuación, siempre según el relato de los hechos de la Fiscalía, los dos acusados abrieron el coche y Manuel registró tanto los bolsillos del joven vigilante como el vehículo.Roi le sugirió a su amigo que buscara si había una cartera,apoderándose él delmóvil de la víctima.

Los dos acusados,según el Ministerio Público, realizaron varias llamadas con dicho teléfono hasta que lo tiraron,no habiendo sido recuperado. La Fiscalía sostiene que ambos acusados“eran conocedores de que el guarda de seguridad estaba desarmado”.Tras el crimen, según declararon algunos testigos que coincidieron con ellos, los dos amigos se fueron fe fiesta a celebrar San Roque enVigo y habrían contado lo ocurrido a varios amigos.

Ambos procesados fueron detenidos horas después por la Policía Nacional en Vigo cuando intentaban forzar la gasolinera de un híper.Circulaban en el mismo coche robado y en su poder tenían la carabina con la quemataron al vigilante.El juzgado de Instrucción 5 deVigo sigue la causa por este robo,así como por la sustracción del vehículo y del arma.