Santiago S. A., el vecino de Cambados que se encontraba en el interior del coche en el que el domingo apareció muerto un joven, vecino de Rois, por una presunta sobredosis de heroína, quedó en libertad con cargos, después de declarar ayer ante el juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 4 de Cambados.

De todos modos, Santiago S., que es más conocido en Cambados como "Tito Vasco", tendrá que comparecer en los juzgados cada quince días, pues se le imputa un presunto delito contra la salud pública, pues los responsables de la investigación consideran que podría ser suya la bolsa con 200 gramos de heroína que había dentro del coche cuando llegó la Guardia Civil, y que en el mercado negro podría llegar a valer unos 6.000 euros.

Mientras, la víctima mortal, Álvaro T. C., de 25 años, será enterrado esta tarde en su parroquia natal, de Urdilde, un lugar próximo al municipio de Padrón, ya en la provincia de A Coruña. Además del fallecido y de "Tito Vasco", en el coche había una tercera persona, Jorge G. S., de 26 años, y vecino también de Urdilde (en el ayuntamiento de Rois), que ayer seguía ingresado en el Hospital Clínico de Santiago. Según el parte médico su estado se ha estabilizado, pero sigue grave.

Al parecer, Álvaro T. y Jorge G. se desplazaron el sábado por la noche hasta Cambados. Viajaron en el coche de la madre del primero y durante la madrugada se habrían encontrado con Santiago S., un hombre de 35 años bastante conocido en Cambados, pues según los vecinos es un supuesto consumidor de drogas.

Los tres hombres habrían pasado la noche por la zona de "copas" y el domingo por la mañana decidieron acercarse hasta O Pombal. Se da la circunstancia de que Santiago S. reside por esa zona -en el barrio de Triana- y aparcaron en las inmediaciones de la piscina, un lugar tranquilo y con poco tránsito de personas los domingos por la mañana.

Fue un vecino el que dio la voz de alarma, sobre las dos y media de la tarde de anteayer, al percatarse de que había tres personas inmóviles dentro del coche y que tenían una de las ventanillas laterales bajadas, a pesar de que en ese momento llovía con intensidad.

En el lugar una patrulla de la Guardia Civil de Cambados y tras requerir a los ocupantes del vehículo, sólo uno de ellos reaccionó, aunque lo hizo aturdido, por lo que los agentes enseguida sospecharon que podría haber consumido alguna droga. Lograron despertar a uno de los jóvenes, y rescatar con vida a otro, pero el tercero había fallecido.