A la espera del veredicto

El jurado decidirá hoy si el histórico ex contrabandista arousano Marcial Dorado Baúlde, juzgado en la Audiencia Provincial de Madrid por cohecho junto con Antonio Berrio, es culpable o no de soborno a dos guardias civiles en 1997.

Los dos imputados están a la espera de un veredicto que podría conllevar tres años de cárcel para cada uno de ellos y multa de 60.000 euros si se acepta la petición del fiscal, que les acusa de haber entregado a dos agentes unos 5 millones de las antiguas pesetas durante 1997 y 1998 para que colaborasen en el contrabando de tabaco, algo que no hicieron.

El tribunal popular deberá sopesar si las pruebas presentadas en la vista oral son suficientes, o si como aseguran los abogados de los dos acusados el objetivo era "cazar a Marcial".

La defensa entiende que se trató de un delito provocado a tenor de la declaración de uno de los dos guardias civiles citados como testigos de la acusación y pide una investigación. El agente, antiguo miembro de la Ucifa y actualmente en excedencia, aseguró que ellos buscaron la captura de Dorado Baúlde por una mera cuestión "estadística". El otro guardia, jefe de la operación y todavía en activo, mantuvo sin embargo que fueron el arousano y Berrio quienes se acercaron a ellos.

Los defensores intentaron poner en evidencia durante el juicio posibles irregularidades. Así, destacaron que los originales de los vídeos y fotografías utilizados como pruebas contra Dorado y Berrio fueron destruidos por la Benemérita sin orden del juez y se les ha juzgado con copias. Consideran también extraño que la Guardia Civil no registrara la numeración de los billetes que supuestamente sirvieron para el soborno, que no los fotografiara y que no se buscaran en ellos huellas o ADN.