"Patata" es un mono con ansias de libertad. Por segunda vez en tan sólo dos meses se escapó de una granja de la localidad lucense de San Miguel de Reinante, en el municipio de A Mariña. Mientras efectivos de Protección Civil y de la Guardia Civil trataban de atraparlo, el primate deambulaba por la zona llegando a entrar en varias casas. Además, tres personas sufrieron el ataque de este animal, al parecer poco amigable.

El mono, bautizado con el nombre de "Patata", convivía en una antigua granja de cerdos junto a otras especies exóticas, como llamas o canguros. Durante la noche del pasado lunes emprendió una huída que le llevó a colarse en al menos dos domicilios del vecindario. En uno de ellos, los moradores se toparon con el animal subido a la cama de uno de los dormitorios. Pero su peripecia no sólo trajo en jaque a los vecinos de la zona, sino también a los agentes de la Guardia Civil así como a los efectivos de Protección Civil que salieron en su búsqueda para tratar de darle captura. No fue hasta la mañana del lunes cuando lo lograron, tras lanzar sobre él una red y después administrarle una inyección tranquilizante, debido a su actitud agresiva.

Este simio "aventurero" no sólo cometió varios allanamientos de morada, sino que llegó a atacar a dos mujeres, cuando estas se dirigían a una huerta, a las que mordió en manos y piernas. Asimismo, causó algunos rasguños a un miembro de Protección Civil, que intentaba atraparlo.

El simio fue enjaulado y recluído en un almacén municipal, a la espera de que el Servicio de Protección da Natureza de la Guardia Civil (Seprona) se haga cargo de él.

Segunda fuga

No era esta la primera vez que el primate se daba a la fuga. El animal ya se había escapado de la granja Reinante a principios del pasado mes de junio. En aquella primera huída arañó a un agente de la Benemérita y a un vecino que intentaban apresarlo. El ayuntamiento de Barreiros y la Guardia Civil abrieron entonces una investigación para comprobar si la granja reunía los requisitos legales para albergar especies exóticas, y Patata quedó a cargo del propietario en situación de cuarentena.