La DGT advierte: estos son los medicamentos que pueden afectar a tu capacidad de conducir

Hay que extremar las precauciones o incluso prescindir de coger el coche si se toma esta medicación

Medicamentos.

Medicamentos. / J.J. GUILLEN

Conducir supone una responsabilidad con la seguridad de uno mismo y del resto de usuarios de la carretera. La DGT es el organismo que se encarga de velar por el cumplimiento de esta premisa y, para ello, lleva a cabo acciones de concienciación ciudadana, tanto a través de las sanciones económicas como divulgación.

De este modo, para conseguir el permiso de conducción no basta con aprobar un examen. El proceso consta de dos pruebas (una teórica y una práctica) y un control psicotécnico para comprobar las condiciones psíquicas del futuro conductor. Unas condiciones que, bajo el efecto de cierta medicación, pueden verse mermadas.

La DGT advierte de que «algunos medicamentos, incluso los que no precisan receta médica, pueden disminuir su capacidad para conducir de forma segura». Si estás tomándolos, debes extremar la precaución al volante o incluso prescindir de ponerse al volante.

La consulta con un profesional sanitario resolverá las dudas de cada caso concreto, pero en términos generales, la Dirección General de Tráfico pone el foco en los medicamentos que generen estos efectos:

  • Somnolencia
  • Dificultad de concentración o para permanecer alerta
  • Visión doble o borrosa
  • Sensación de vértigo
  • Disminución de reflejos: lentitud de reacción
  • Falta de coordinación, sensación de inestabilidad
  • Desvanecimientos, mareos

Medicamentos que pueden afectar a la conducción

Una mujer con dolores cervicales, como los que sufre la protagonista de la noticia, en una imagen de recurso

Ojo con los medicamentos que generan somnolencia o vértigos. / Archivo

Entre los medicamentos que pueden disminuir la capacidad para conducir cabe destacar los que se utilizan para tratar las siguientes patologías, debido a sus efectos secundarios:

  • Los trastornos del sueño (Hipnóticos): somnolencia, disminución de la atención y disminución de la capacidad de reacción.
  • La ansiedad (Ansiolíticos): somnolencia, disminución de la atención y disminución de la capacidad de reacción.
  • La psicosis (Antipsicóticos): somnolencia, mareo, agitación, cansancio.
  • La depresión (Antidepresivos): nerviosismo, ansiedad, somnolencia, alteración de la coordinación, visión borrosa.
  • La epilepsia (Antiepilépticos): somnolencia, mareos, visión borrosa, fatiga, sensación de debilidad). 
  • El párkinson (Antiparkinsonianos): somnolencia, episodios repentinos de sueño, espasmos, visión borrosa, confusión.
  • El dolor (Analgésicos): somnolencia, disminución de la capacidad de concentración y de reacción, mareo.
  • Las migrañas (antimigrañosos): somnolencia, mareos, debilidad.
  • Para anestesiar (Anestésicos)
  • La demencia
  • Las alergias (Antialérgicos): somnolencia, capacidad de reacción reducida, visión borrosa (colirios).
  • Gripe y catarro (Antigripales y Anticatarrales): somnolencia.
  • Afecciones oculares: visión borrosa.

Cómo saber si el medicamento perjudica la conducción

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) expone en un documento sobre el uso de medicamentos y la conducción que aquellos que puedan tener efectos secundarios al volante deben incluir un pictograma determinado.

Se trata de un símbolo triangular con los bordes rojos y un icono de un coche negro en el interior. «Este pictograma no prohíbe la conducción, sino que le advierte que es recomendable leer en el prospecto donde están descritos todos los efectos adversos», aclara la AEMPS.

Tracking Pixel Contents