Galicia alcanza los 30º, pero las borrascas vuelven a asomar desde el Atlántico

El progresivo ascenso de las temperaturas en Galicia que se anunciaba desde finales de la pasada ha alcanzado este lunes su punto culminante. La estación situada en Leiro ha llegado a los 30,4 grados Celsius, y otras localidades de la comarca de O Ribeiro y Ourense capital han rozado esa cifra. En las Rías Baixas, los termómetros se han quedado alrededor de los 25 grados. Son valores más propios del verano que de finales de marzo.

Pero no se prolongará mucho tiempo este dominio anticiclónico: desde al Atlántico ya asoman borrascas que devolverán las lluvias al territorio gallego durante esta semana. También caerán las temperaturas máximas hasta valores más propios de la primavera.

Ya mañana martes se incrementará la inestabilidad, según la previsión de MeteoGalicia. La comunidad quedará en una situación intermedia entre las altas presiones ubicadas al norte y las bajas presiones que se van acercando desde el oeste, dejando aire frío en altura. Los cielos se presentarán con nubosidad de tipo medio y alto, con más nubes en la franja atlántica.

Por la tarde habrá posibilidad de chubascos dispersos, más probables en comarcas del interior. Las temperaturas mínimas ascenderán y máximas estarán en descenso, alrededor de 20 grados en general y hasta 25º en Ourense. Los vientos soplarán del sur-sudoeste moderados, cambiando a este al final del día.

Durante el miércoles una borrasca ubicada al oeste de la península ibérica inestabilizará más la atmósfera. Con esto, durante la mañana los cielos estarán con nubosidad de tipo medio y alto, pero con el paso de las horas irán creciendo nubes de evolución que dejarán chubascos localmente tormentosos. Las temperaturas sufrirán otro descenso. Los vientos soplarán flojos de componente este, con intervalos moderados en tierra e intervalos fuertes en el mar.

Panorama similar para el jueves. Galicia seguirá en la influencia de las bajas presiones, que se aproximarán hacia el sudoeste peninsular trayendo un día de inestabilidad atmosférica. La jornada comenzará con cielos con alternancia de nubes y claros, pero por la tarde nubes de evolución derivarán en chubascos localmente tormentosos. Las temperaturas mínimas no tendrán cambios, mientras las máximas registrarán otro ligero descenso. El viento soplará de componente este con intervalos moderados.

Aunque es pronto, parece que durante el fin de semana Galicia quedará en una situación intermedia entre un anticiclón situado al norte de Escocia y una borrasca entre Azores y Portugal. De este modo, el pronóstico será cambiante, con días de alternancia de nubes y claros con posibilidad de chubascos de tipo tormentoso. Las temperaturas no tendrán grandes cambios significativos. Según la Aemet, las lluvias serán más probables el viernes y el domingo.

Polen

Malas noticias para los alérgicos. El calor de estos días, sumado a las borrascas anteriores, está propiciando un incremento de los niveles de polen. De acuerdo con la Rede Galega de Aerobioloxía, el ascenso de las temperaturas máxima hace que el contenido polínico en la atmósfera ascienda a niveles moderados o altos en toda Galicia.

Especies como pinos, chopos, robles o sauces están en plena floración, por lo que en algunos puntos del sur de la comunidad se pueden alcanzar valores altos, en el caso de los pinos. También las ortigas están registrando niveles elevados, tanto en la costa como en el interior de Ourense.