Premian la investigación sobre música y salud de Sensogenoma

La música de Sensogenoma, una iniciativa del Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago (IDIS) con participación ciudadana que destaca por su innovador enfoque en investigación sobre música y salud, y que ya ha mostrado evidencias que apuntan «a beneficios de la música en las enfermedades neurodegenerativas, en la parálisis cerebral o en el trastorno del espectro autista», según ha señalado anteriormente Federico Martinón, uno de los coordinadores del proyecto, acaba de recibir uno de los galardones de la convocatoria de Investigación e Innovación Responsable en Salud (RRI) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).  

En concreto, el reconocimiento es para la propuesta Sensogenoma22, en la vanguardia científica y cultural, liderada por el área de Infectología, Inflamación y Vacunas del IDIS (grupos de investigación GenPoB y GenViP), que en los últimos meses llevó a cabo conciertos «donde el público participó en investigaciones genómicas, fomentando la divulgación y la participación ciudadana para mejorar la calidad de vida de pacientes con enfermedades crónicas». Con esas palabras, la comisión encargada de entregar el premio puso en valor el trabajo de Sensogenoma en un acto celebrado ayer en Madrid y que contó con la presencia de la directora científica del IDIS, María Luz Couce Pico; la investigadora Laura Navarro Ramón, y el investigador principal del proyecto, Antonio Salas Ellacuriaga, también catedrático de la Facultad de Medicina de la USC e investigador del IDIS. Los tres estuvieron acompañados por Marina Pollán, directora del Instituto de Salud Carlos III.

Tras recibir este reconocimiento, Antonio Salas aseguró que «hay muchísimo esfuerzo detrás y más ilusión si cabe. Les doy la enhorabuena a todos los que nos han acompañado y nos siguen acompañando en esta hermosa aventura, con especial cariño a la Real Filharmonía de Galicia y a todas las asociaciones de pacientes que colaboran».

Por su parte, Mª Luz Couce Pico definió la participación ciudadana como «el motor que conecta la ciencia con la sociedad, garantizando que el conocimiento generado responda a los verdaderos intereses y necesidades de la comunidad, y este proyecto es un gran ejemplo de esta conexión».