El 20% de los adolescentes españoles sufre algún síntoma de ansiedad, según la Sociedad Española de Medicina de la Adolescencia. Y en muchos casos esa preocupación extrema guarda relación con los estudios. Así lo constatan expertos como Román Marín, que destaca la importancia de saber buscar ayuda.

–¿Qué lleva a muchos adolescentes y jóvenes a sentir ansiedad ante el inicio de un nuevo curso?

–Lo más importante es que se centran en cosas que no pueden controlar, como querer sacar buenas notas o entrar en la carrera de sus sueños. Lo que sí pueden controlar es tener unos buenos hábitos de estudio o tomar buenas decisiones a nivel de orientación profesional, pero, por mucho que se esfuercen, no pueden controlar qué preguntas les van a caer en el examen, cuál va a ser la nota de corte de la ABAU... Con todo, habría que analizar cada caso individual para ver cuál es la causa de su ansiedad.

–La incertidumbre se vive realmente en todas las etapas de la vida...

–Sí. La incertidumbre y la presión nos afectan a todos, seamos adolescentes, jóvenes o adultos. Basta con recordar cuando todos estuvimos confinados a raíz de la situación sanitaria reciente. Los jóvenes no sabían qué iba a pasar con sus estudios y los adultos no sabían qué iba a pasar con sus trabajos. La realidad es que la ansiedad muchas veces es una respuesta ante la falta de control.

–¿A qué se debe que hayan aumentado los casos de ansiedad motivados por los estudios?

–Vivimos en una sociedad donde cada vez dedicamos más tiempo a lo urgente y menos tiempo a lo importante. Tendríamos que hacer una reflexión individual: ¿Cuánto tiempo dedicamos al día a agobiarnos por temas de estudios o de trabajo y cuánto tiempo dedicamos al día a nuestros seres queridos? Y hablo de tiempo de calidad.

–Qué síntomas nos deben alertar sobre un problema de ansiedad generado por los estudios?

–La respuesta, como buen gallego, es que depende. Depende de la persona y del momento. Pero existen síntomas más relacionados con lo psicológico, como preocuparse constantemente, estar más irritable, evitar determinadas situaciones, etc. y síntomas más relacionados con lo físico, como una sensación de presión en el pecho o sensación de falta de aire.

–¿Cómo se puede distinguir el nerviosismo normal que genera un nuevo curso de un problema de ansiedad?

–Principalmente por la duración en el tiempo. Los nervios por el principio de un nuevo curso van disminuyendo a medida que empieza el curso. La ansiedad, en cambio, suele ser más persistente. Más aún si hablamos de trastornos de ansiedad.