¿Es sana la dieta vegana para los bebés?

La nutricionista gallega Natalia Albino recuerda que los niños absorben los nutrientes de forma diferente a los adultos o | Recomienda suplementar con B12

Niño comiendo vegetales.

Niño comiendo vegetales. / Svetlana Repnitskaya

Alba Prada

A pesar de que cada día es más común en Galicia escuchar hablar de veganismo, especialmente entre los jóvenes, los profesionales sanitarios siguen siendo reticentes. Sobre todo cuando se trata de bebés. Una gran parte de los pediatras se llevan las manos a la cabeza cuando los padres, aun dudando si es mejor seguir omitiendo el asunto, les dicen que son veganos y que, obviamente, el bebé también. “¿Pero no come ni siquiera huevo o leche?” preguntará el pediatra o enfermero de turno... Y es que el desconocimiento genera miedo y el miedo hace a la gente decir estupideces.

La Asociación Americana de Dietética, junto a muchos otros organismos oficiales, es tajante al respecto, y lo es ya desde los años 90: la dieta vegana es apta para todas las personas en cualquier etapa vital.

La alimentación plant-based cobra reconocimiento y es válida durante el embarazo, la lactancia y la infancia. Y así lo ratifica Natalia Albino, nutricionista especializada en este tipo de alimentación, que actualmente trabaja para el Sergas en Vigo. La especialista certifica que el bebé puede vivir perfectamente sin alimentos de origen animal.

Revisar los menús

“Lo primero que hay que hacer es revisar los menús de los padres para asegurarse de que comen bien y luego adaptarlos al pequeño”, señala a “El Correo Gallego”, periódico de Prensa Ibérica.

La especialista recalca que en los bebés la absorción de los nutrientes difiere con respecto a los adultos. “Por ejemplo, el hierro lo asimilan peor y es fácil que tengan anemia. Pueden tomarlo en buenas cantidades en alimentos proteicos como las legumbres, el tofu o lo soja texturizada. Es bueno que consuman un par de raciones al día y se intensifica su poder al combinarlos con vitamina C”, cuenta. “Añadir un poco de limón a las lentejas o crema de frutos secos a los purés es una buena idea”, explica Natalia.

La especialista también recuerda que nunca hay que ofrecer al bebé la proteína en forma de alimentos procesados, es decir, aquellos que imitan a la carne como las hamburguesas, salchichas o fiambre, puesto que están cargados de grasas y sal. “Tampoco los adultos deberían comer esto”, advierte.

Yodo

Con respecto al yodo, la nutricionista señala que los pequeños lo obtienen de la leche materna, o bien de la de fórmula, que está enriquecida con este mineral. “Evitaría las algas en niños porque tienen muchos metales pesados acumulados”. Sostiene además que la sal yodada es una buena fuente para obtenerlo. Y en lo tocante a la Vitamina D, la especialista insiste en que “hay que individualizar”. Lo ideal es hacerse una prueba para ver los niveles y adaptar la dosis. “En Galicia tomamos poco el sol, así que lo corriente es que esté baja”, dice.

Pirámide alimentaria vegana

Pirámide alimentaria vegana

Otro punto importante que debe tener en cuenta toda familia con una ideología antiespecista es la necesidad de tomar B12. “Esta vitamina es de origen bacteriano. Se encuentra en alimentos procedentes de animales, por lo que un vegano no va a tener suficiente y hay que suplementar”. Y por supuesto a los niños ya desde los seis meses, momento en el que empiezan la alimentación complementaria. “En bebés se recomienda mejor a diario e ir adaptando la dosis a su edad. Puede ofrecérsele machacada o bien en formato líquido”.

Analíticas

Tal y como se comentaba anteriormente, una gran parte de sanitarios, especialmente los mayores, no se reciclan. Por ello, son muchos los padres veganos que se quejan de que obligan a hacer análisis de sangre a sus bebés por la simple razón de no tomar alimentos de origen animal. “No está justificado, solo si no está bien. Esto se hace por desconocimiento, es una forma de cubrirse las espaldas. En casos así yo recomiendo que si no estás contento con el profesional, te busques otro”, dice tajante. A todos ellos les recuerda que existen muchos casos de anemia y obesidad entre gente omnívora, ya que consumen más calorías que nutrientes. “A la hora del aporte de proteína, por ejemplo, al cuerpo le da igual que provenga del pescado o del tofu”, sentencia la especialista.

Embarazo

Comer sano en el embarazo es importante y por supuesto la alimentación vegana es perfectamente factible en esta etapa. “Algo que me repatea es que algún médico, cuando una persona vegana está embarazada, le diga que coma al menos un huevo a la semana”, dice. “Si comes bien no te hará nada tomar un huevo, y si comes mal, no va a mejorar tu alimentación tampoco”. El problema de todo esto “es que, en Galicia, y en España en general, no hay formación en este campo”. De hecho, ella misma en la carrera estudió literalmente tres páginas, por lo que tuvo que especializarse por su cuenta.

Y esta falta de profesionales redunda también en problemas a la hora de diseñar los menús en los comedores. Asignatura pendiente en general, pero en particular para los niños veganos, que o bien se llevan su táper o los padres hacen malabares para que coman en casa. España y Galicia necesitan una conciencia más empática con los animales y con sus principales defensores. Avanzamos, pero más lento de lo que el mundo exige.