El estudio llevado a cabo por el consorcio internacional RESCEU y en el que participa España a través del Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago de Compostela (IDIS), liderado por Federico Martinón y Antonio Salas, alerta sobre la alta afección del virus respiratorio sincitial, que es "el verdadero COVID-19 de los niños".

Este estudio, financiado con el soporte del programa europeo Horizonte 2020, se ha elaborado con el seguimiento de más de 9.000 recién nacidos sanos durante al menos 1 año, vigilando específicamente qué sucedía con el virus respiratorio sincitial".

Con la participación de 5 países, el trabajo muestra que 1 de cada 56 recién nacidos sanos que se infecta por virus respiratorio sincitial, acaba ingresando en el hospital.

"Son datos para países de alto nivel económico, y ratifican la enorme carga de enfermedad y sufrimiento que el VRS supone para los niños, y es que el VRS es el verdadero Covid-19 de los niños", señala Martinón en una nota y remarca que "en entornos más desfavorecidos, la cosa todavía es peor, y de hecho ahí se producen la mayoría de los 60.000 fallecimientos que cada año causa el VRS en lactantes".

El VRS, que infecta prácticamente a todos los niños menores de dos años, es la principal causa mundial de infecciones agudas de las vías respiratorias bajas en niños pequeños y se asocia con una alta morbilidad y mortalidad infantil.

Se estima que cada año el VRS causa aproximadamente 34 millones de nuevos episodios de infección pulmonar en niños en todo el mundo y 3,2 millones de ingresos hospitalarios.

Con estos datos, Martinón señala que "el VRS es el enemigo número uno de los lactantes" e incide en que "solo en este mes han ingresado más niños por esta infección en Santiago, que por Covid-19 en toda Galicia en el total de la pandemia".

En el Hospital Clínico de Santiago se trabaja en el desarrollo clínico de más de una docena de soluciones, entre antivirales, anticuerpos monoclonales y vacunas para la mujer embarazada, el lactante o las personas de edad avanzada".

La reciente aprobación por la agencia europea del medicamento de un anticuerpo monocolonal para prevención del VRS en todos los lactantes, y la inminente llegada de vacunas para la mujer embarazada con el mismo objetivo, marca un antes y un después, una revolución necesaria para poner fin a la infección más temida en nuestros lactantes", asevera Federico Martinón.