“La pandemia del COVID puso de manifiesto que la sanidad y la economía no es igual para todos. Faltó apoyo social para los más desfavorecidos, espero que lo haya para la próxima. Como país deberíamos aprender que hace falta invertir en ciencia y tecnología, no solo en autopistas”. Así respondía el jefe de medicina preventiva del CHUVI, Víctor del Campo, a la pregunta sobre cuál habían sido los fallos en la gestión de la crisis sociosanitaria provocada por el COVID-19 que lanzaba el editor Xabier Romero, presentador del acto celebrado en el Club FARO, en el museo MARCO, bajo el título “Peste, gripe y COVID-19. Las epidemias que azotaron Vigo”, que contó también con la participación como ponentes y tertulianos de los historiadores Antonio Giráldez y Xoan Carlos Abad, vicepresidente y presidente del Instituto de Estudios Vigueses, respectivamente.

Como autor de la novela histórica “1598. La peste en Vigo. El secreto del reclinatorio del prior” (editorial Elvira), en la que narra en dos tiempos lo sucedido en el siglo XVI y establece paralelismos con la pandemia que se inició en 2020, Antonio Giráldez partió para escribir su libro de dos documentos históricos firmados por el prior de La Colegiata –el de los daños causados en Vigo en 1598 por Sir Francis Drake, que destrozó 250 casas y el que anunciaba que iba a abandonar Vigo por la peste en 1598, año en que la mala cosecha y la escasez de pesquerías habían provocado una gran hambruna–.

“El aislamiento y el consuelo espiritual eran los remedios a la peste de 1598”

Antonio Giráldez - Historiador

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“La primera reacción de la población era poner tierra de por medio, salían infectados, aunque sin síntomas, y propagaban la enfermedad”, manifestó. “El aislamiento, que propugnaba el alcalde de Vigo, entonces llamado juez, y el consuelo espiritual eran los remedios que se buscaban. Se invocaban a los santos protectores, de hecho la capilla de San Sebastián se construyó por haber superado un brote anterior y en 1599 se ordena la construcción de la capilla de San Roque”.

Giráldez aludió a la conciliación entre salud y economía ya en el siglo XVI, apuntando que las prohibiciones de realizar transacciones comerciales acentuaron el problema del hambre durante la peste de 1598 en Vigo. Calificó de gran cierto la construcción del lazareto de San Simón en el siglo XVIII tras el cólera a como ejemplo de “barrera de contención que multiplicó el comercio en el puerto de Vigo”.

“La mortalidad por COVID en Vigo es menor a la media de España”

Víctor del Campo - Médico

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Xosé Carlos Abad, autor de “E o outono tinguiuse de luto. A gripe de 1918 en terras de Vigo”, explicó que esa epidemia llegó cuatro años después de las fiebres tifoideas con gran incidencia en Vigo, Lavadores y Bouzas (ayuntamientos independientes en la época que sumaban una población de 50.000 habitantes), la cual puso al descubierto “muchas carencias que se iban a solucionar. Llegó 1918 y volvió suceder”. “La situación médica era lamentable, el agua de la traída llegaba del centro al extrarradio con problemas, en gran parte de la ciudad no había alcantarillado, sino regatos de aguas purulentas, en la calle del Príncipe la gente vivía con animales en sus casas; solo había un hospital, el de Elduayen, con 50 camas, junto al militar y una enfermería en los cuarteles de San Sebastián”, describió.

“Se combatían los síntomas con antitusivos y desinfección, como hoy en día: zotal y lejía. Igual que en todas las pandemias hubo gente que sacaba beneficios con negocios: una empresa vendía camisas antigripe, con lana de oveja, y otras, impermeables. Hubo una mortalidad elevada – habló de unos 657 muertos de septiembre a diciembre, lo que equivaldría a más de doce mil en la actualidad y aludió problemas de espacio para efectuar los enterramientos – que se cebaba con la población de entre 20 y 30 y pico años por tres motivos: socializaban más, muchos hombres estaban haciendo el servicio militar en cuarteles con grandes concentraciones y porque eran personas no inmunizadas a la gripe”.

“La gripe de 1918 se cebó con población joven, de 20 a 30 y tantos años”

Xoan Carlos Abad - Historiador

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Abad también habló de las guerras de cifras, “en el registro civil a veces no ponían que el fallecimiento era por gripe pero sí por otras problemáticas asociadas”, “los días que moría más gente decían que lo peor y había pasado”, “los más humildes iban trabajar y expandían el contagio, hasta que las empresas decidieron que se quedaran en casa cobrando medio salario”, “hubo colectas públicas para mejorar la alimentación, los Exploradores de Vigo tomaron parte activa para llevar alimentos a comedores, asaltaban a las lecheras y les pedían algo, también iban al Berbés”. “No hubo confinamiento pero sí se prohibieron espectáculos, bares y aglomeraciones”.

De la pandemia actual habló Víctor del Campo, que constató ciertas similitudes entre las medidas tomadas en la peste y la gripe, pero puntualizó que las fuentes de entrada del COVID eran más que en anteriores epidemias –contabilizó 14 procedencias diferentes en Vigo–. Para el especialista en medicina preventiva e infecciones, la clave par atajar el COVID-19 fue la vacuna de RNA mensajero, “algo con lo que no contábamos en otras epidemias”, y que el área sanitaria de Vigo tiene más de dos mil camas, atención a agudos y UCIS”. “Las menos de 800 muertes registradas directas por COVID indican menos de 0,5% de mortalidad, lo que es bastante inferior a la media de España y del resto del mundo. Eso indica que lo hemos hecho bien, dicen que no eres de Vigo si no te has hecho dos PCR. Y las tasas de vacunación en rangos de edad avanzada son muy elevadas, muy por encima de otras zonas de España”.

Del Campo recomendó ponerse la cuarta dosis de la vacuna y combinarla con a de la gripe, “no tengo ninguna duda”, dijo . A la pregunta de si nos esperan más pandemias, el galeno respondió afirmativamente, y mencionó la viruela del mono, insistiendo en que el COVID aún no ha desaparecido.

“Las grandes epidemias están asociadas a fenómenos de globalización; si la globalización cada vez es mayor, habrá más”, manifestó Abad. “De la misma manera que la globalización trae el mal, traerá el remedio, poniendo las vacunas a disposición de quien las necesite”, terció Giráldez.