Protección Civil ha levantado este sábado el nivel de alerta por lluvias del plan de emergencias por inundaciones (INUNCAT) una vez ha pasado la fase más extrema del episodio de precipitaciones anunciado para este fin de semana, que en la tarde de ayer dejó inundaciones en el litoral de Tarragona.

El comité técnico del plan INUNCAT, reunido este sábado, ha rebajado el aviso por lluvias al nivel de prealerta a la espera de un nuevo frente de precipitaciones, que esta tarde afectará al Pirineo, Prepirineo, nordeste de Cataluña y la zona de Tarragona, aunque se prevé que no se superen los veinte litros por metro cuadrado en treinta minutos ni que alcance la intensidad de ayer.

Las lluvias que este viernes cayeron en varios municipios de Tarragona han provocado que todavía unos 1.200 abonados de varias localidades de la zona continúen sin suministro eléctrico, según ha informado Protección Civil.

La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y la Agencia Catalana del Agua (ACA) han señalado, por su parte, que no se prevé caudales por encima de la capacidad de las cuencas de los ríos, aunque sí se han incrementado en las últimas horas en algunos de las comarcas del Solsonès y el Berguerdà, aunque a niveles poco relevantes.

Los gestores de los ríos señalan, sin embargo, que en las próximas horas habrá que estar pendientes de los cursos fluviales, especialmente en el tramo más bajo del Llobregat, donde piden precaución en las actuaciones al aire libre, como caminar o ir en bicicleta.

La Dirección General de Protección Civil también ha informado de que el hospital de Santa Tecla de Tarragona ha recuperado la normalidad tras la inundación este viernes por la noche de la zona de vestuarios ubicada en los bajos del centro y que no afectó al área asistencial.